jueves, 26 de noviembre de 2009

¡Que se acaba la alfalfa!

Las principales radio con sede en Barcelona -RAC1, Catalunya Radio y COM Radio- se han adherido al editorial que publican 12 diarios editados en Cataluña en los que instan al Tribunal Constitucional (TC) a respetar el Estatuto y ponen en duda su legitimidad.
Según han informado estas emisoras, su adhesión es total y así lo han puesto de manifiesto los conductores de sus programas matinales.” [LD. 26-11-2009]


Decía un amigo mio muy aficionado a la malta destilada que había que correr la voz de que el güisqui era una bebida malísima, porque la producción mundial era limitada y cuantos menos seres humanos estuviesen dispuestos a consumirlo, a mas litros tocabamos por cabeza.
Algo parecido le pasa a la alfalfa... sólo que, mientras el gïsqui no le gusta a todo el mundo y su consumo se carga contra el bolsillo del consumidor, la alfalfa – producto necesario para la alimentación del semoviente – lo aporta el contribuyente, a través de las extorsiones que nuestros representantes democráticamente elegidos (por el 30% del 40% del porcentaje correspondiente del personal censado) someten al gobierno... y eso hace muchisimo mas deseable el producto.
Y ninguno quiere quedarse sin su ración de alfalfa...
De ese modo un señor que parece que escribe sin cometer demasiadas faltas de ortografía (benditos correctores automáticos) y que normalmente no se documenta antes de opinar (a tanto la linea) sobre un tema cualquiera, se permite poner en tela de juicio la legitimidad del Tribunal Constitucional para dirimir acerca de temas relativos a la Constitución.
Y lo hace porque lo manda el macho alfa del rebaño.
Asi, una actividad que supuestamente debería estar encaminada a un proceso intelectual, queda reducido a un proceso puramente digestivo... es mas cómodo y gasta menos calorías.
Yo no pongo en duda la legitimidad del Tribunal Constitucional para dirimir sobre conflictos generados por esta basura de Constitución que nos hemos dado... admito que pongo en duda la cualificación, la independencia y la honestidad intelectual de sus miembros, pero en una sociedad formada por personal cuyos ancestros han pasado por el Renacimiento, lo adecuado es que un tribunal juzgue sobre el objeto de su ámbito juridico.
No comprendo tampoco porque siendo yo español y perteneciendo Cataluña a España desde que tengo uso de razón, no me han preguntado mi opinión acerca del Estatut... y dado que su financiación va a salir, tambien, de mi bolsillo, deberían – por cortesía – haberme incluido en la decisión.
Claro que entonces, seguramente, no habría Estatut.
Y seríamos todos mas felices.
Todos menos los mangantes que pretenden hacer de eso su pesebre.