domingo, 30 de junio de 2019

Detrás del orgullo

Lo del día del orgullo gay, que pasó a ser semana del orgullo gay y lleva camino de convertirse en mes del orgullo gay, me ha parecido siempre un despropósito.
Los colectivos LGTB que son esas asociaciones hiper-subvencionadas para actuar como ariete de la izquierda, dicen defender unos derechos que en España, de facto, ya tienen los homosexuales.
En España, desde hace mucho tiempo, un homosexual tiene los mismos derechos que un heterosexual... básicamente porque nuestra Constitución contempla al ciudadano con independencia de su orientación sexual.
No sucede así en Irán, Arabia Saudita o Cuba, pero esa es otra historia.
Llevan un montón de tiempo dando la matraca para que "aceptemos" sus imposiciones sin rechistar... en esto - hay que reconocerlo - son casi tan pesados como los cansinos de Torra y su república imaginaria.
Y por poner un ejemplo, hablaré del derecho a a la adopción.
El "derecho" a adoptar niños por parte de parejas de homosexuales, lamento decírselo, no existe... y no existe para parejas homosexuales ni para parejas heterosexuales, porque la adopción es un derecho del niño, no de los padres adoptivos.
Y la obligación del Estado, en este caso, es garantizar que el niño se va a criar en un ambiente adecuado, estable, etc... independientemente de que los que quieren adoptar al niño sean homosexuales o no.
Se ha generalizado el argumento de que en una pareja de homosexuales pueden darse las condiciones necesarias de estabilidad y cariño para que el adoptado sea feliz... y yo no voy a oponerme a este argumento si usted me acepta que también pueden no darse.
Porque la condición de homosexual no lleva implícita la bondad, aunque entre ellos (igual que entre los que no lo son) encontremos bellísimas personas.
No se si sabe que en America del Norte, que fue pionera en estas historias, hay ya un nutrido colectivo de damnificados por la adopción por parte de parejas homosexuales... asociaciones silenciadas sistemáticamente por el lobby rosa y sus palmeros.
Al igual que sucede con las "feministas", que es un adjetivo que todos quieren ponerse (ellos y ellas), lo que piden estos cuentistas de los "colectivos" con sus actos de presión social es discriminación positiva.
Y a la discriminación positiva le pasa que en castellano tiene otro nombre: privilegios.
De modo que esto del "orgullo", en España, por mucho que nos lo cuenten, no es un tema de defensa de derechos, es una cosa de obtención de privilegios.
Y si no te avienes a sus caprichos, eres un homófobo.
Porque para estos jetas que viven del cuento y de nuestros impuestos, cualquier discrepancia es homofobia.
Y luego viene la segunda parte...
Montarse en una carroza con un tanga de leopardo y una corona de plumas por toda indumentaria le aproxima a uno mucho mas a un evento carnavalesco que a un acto de reivindicación de derechos... y desde luego no favorece a la opinión que los demás podamos tener de ese colectivo.
Para mi - que quieren que les diga - es mas un problema de mal gusto que otra cosa... por muy bonito que lo quieran pintar.
Se da el caso de que de un tiempo a esta parte, estos colectivos de hooligans de la orientación sexual, han empezado a repartir carnets de demócrata...y nuestros políticos - para mi asombro - han empezado a comprarlos.
Los organizadores del "orgullo" no sólo se ofenden si no pones el trapito de colores en la fachada del ayuntamiento de Madrid, sino que además quieren que sustituya a la bandera de España... que según dicen, está ahí porque lo ha impuesto Vox.(????)
A Ciudadanos, porque no pacta con el PSOE y admite los votos de Vox le han vetado la carroza en Madrid, y en Valencia se la han pintarrajeado... porque los de la dictadura rosa son lo que son: una partida de energúmenos al servicio de la izquierda.
Y hasta que los demás partidos no asuman esto, hasta que PP y Ciudadanos dejen de consentir que les roben la cartera, de apoyar estas estupideces, tendrán bien merecido el veto.
A mi no me tienen que vetar, me veto yo solo, porque con esta chusma no quiero ir ni a recoger una herencia... y no es homofobia, es discrepancia (un ejercicio de libertad ¿recuerdan?)
Y dejen ya de subvencionarlos... que las juergas heterófobas se las paguen ellos.
Un poquito de respeto a nuestros bolsillos.

miércoles, 26 de junio de 2019

Yo y mi derecho

Hace unos días en el transcurso de una charla informal me di cuenta de que la polisemia del lenguaje produce siempre defectos de interpretación.
Esto aumenta cuando el lenguaje pasa de lo que podríamos llamar lenguaje natural a lenguaje técnico.
El problema es que estamos condenados a usar las mismas palabras para describir cosas diferentes, de ahí que sea muy común que en lo cotidiano se recurra a anglicismos cuando entramos en temas relacionados con la técnica o los negocios.
No lo justifico. El Español es un lenguaje lo suficientemente rico como para poder afrontar los retos de nominar las cosas nuevas que van apareciendo... quizá el problema radica en que cada vez usamos menos palabras para expresarnos.
Un adolescente en España tiene un vocabulario aterradoramente pequeño, fruto - indudablemente - de la caída en picado de la lectura ante el consumo de productos "multimedia" (videos, audios...)
La interpretación que del término "derecho" hace una buena parte de la sociedad española es es un caso paradigmático.
Los "derechos" desde el punto de vista jurídico deben interpretarse como ausencia de injerencia... me explicaré.
Cuando nuestra Constitución dice que los españoles "tienen derecho" a una vivienda, lo que está diciendo es que si yo, español, deseo comprarme o alquilar una vivienda, el Estado o mis vecinos no pueden hacer cosa alguna para impedírmelo, dado que es un "derecho" contemplado en nuestro ordenamiento jurídico.
Esto es interpretado por los de siempre, los que no entienden de nada, como que el Estado "está obligado" a proporcionarme una vivienda... y no es así.
Algo parecido sucede con la educación o con la sanidad.
El que tiene derecho a estudiar es el niño, y si no posee los medios económicos necesarios, el Estado, de forma graciable, le proporciona con nuestros impuestos la posibilidad de recibir esa educación.
Y esto es así porque somos un país generoso y solidario (como gusta decir a los progres) y en su momento acordamos que fuese así... pero obligación no tenemos ninguna.
Si el niño no desea estudiar yo no tengo ninguna obligación de proporcionarle medios para que lo haga... de una manera explicita, el niño que manifiesta una reiterada actitud negativa ante su propia formación, está renunciando a su derecho.
Sucede que mientras el niño es pequeño asumimos que no posee la madurez necesaria para tomar esa decisión, y le "obligamos" a formarse. Esto lo hacemos también de forma egoísta para evitar que nuestra sociedad se llene de analfabetos, pero en el momento en el que el muchacho adquiere la mayoría de edad, el Estado pierde "la obligación" de educarle.
Las becas para estudiar no se proporcionan porque el estudiante sea pobre, se proporcionan porque quiere estudiar y no dispone de recursos.
Si no aprueba las asignaturas, no hay que becarlo... del mismo modo que si su padre puede correr con los gastos de su educación, tampoco hay que becarlo.
Con la sanidad sucede lo mismo.
Si te pones enfermo el Estado no puede impedir que intentes curar tu enfermedad... y si no posees los medios pare ello, te proporciona unos servicios sostenidos por la Seguridad Social (que lamento decirlo pero fue un invento del franquismo, no de Felipe González, a cada uno lo suyo).
Significa esto que si yo quiero aumentar el tamaño de mis pechos o rectificar la curvatura de mi nariz, al no poder considerarse esto una enfermedad, el Estado no tiene obligación alguna de financiármelo.
El embarazo, por ejemplo, no es una enfermedad (que yo sepa).
De modo que financiarme la "interrupción del embarazo", que sería el equivalente a "sanar" la "enfermedad", no es obligación del Estado... así que lo del "aborto libre y gratuito" será muchas cosas, pero no tiene nada que ver con el derecho a la sanidad.
¿Estamos?
El español por el mero hecho de serlo tiene derecho al trabajo... es decir, repito machaconamente, que el Estado no puede impedirle trabajar cuando - con su esfuerzo y preparación - consigue un contrato laboral.
Y ya está.
Puede sonar duro, pero hasta que no asumamos que todas esas prestaciones que el Estado reparte en nuestro nombre son fruto de nuestra natural generosidad y que no estamos obligados a proporcionarlas, nuestros políticos van a estar tirando el dinero en nuestro nombre.
A los MENAS (y disculpen que siga con la matraca) que son esos menores que llegan sin oficio ni beneficio a nuestro país, les acogemos en centros de menores y les proporcionamos una "paga" hasta su mayoría de edad.
Esta paga que puede equipararse a la pensión de viudedad (unos 600 euros) ha sido recientemente ampliada en Cataluña hasta que el menor alcance los 23 años.
Habida cuenta que el sueldo mínimo en Marruecos es de unos 200 euros, es decir, que por partirse el lomo de sol a sol te pagan 200 euros, ¿No creen ustedes que esto produce un cierto "efecto llamada"?
Es mas, ¿Creen ustedes que ese efecto llamada se va a producir sobre personas formadas y cualificadas para trabajar, que al llegar a España pueden optar por un sueldo mayor?
No, nuestras subvenciones atraen únicamente a inempleables.
Y no me opongo a que alguien que llega nuevo a España tarde un tiempo en aprender nuestro idioma y adquirir una formación - si no la tiene - que le permita integrarse en nuestra sociedad y tirar del carro como hacemos todos... pero si manifiesta una reiterada voluntad de no integrarse, no aprende un oficio y se contenta con la subvención, lo que hay que hacer con él es mandarlo a su casa.
No tiene derecho a que yo le subvencione... porque ese derecho no existe.
Así que habrá que empezar a decirle a nuestros representantes que tengan un poquito de respeto por nuestros bolsillos.
Y eso, creanme, no está reñido con la "solidaridad" o los derechos humanos.
Eso es lo que quieren hacernos creer los que viven de ese cuento.

lunes, 24 de junio de 2019

Infancia Libre

Resulta que al final, "Infancia Libre" no era mas que una banda de malhechores.
Esa asociación que fue asesora oficial de Podemos en materia de "violencia de género", que recibía jugosas subvenciones públicas, no era mas que un club de criminales.
Se dedicaban a hacer denuncias falsas y dar asesoramiento y soporte a aquellas mujeres que - vulnerando la ley - querían impedir que los padres de sus hijos tuviesen algo que ver con su custodia... y se nutría, además, de nuestros impuestos.
Había en esta banda psicólogos, psiquiatras, abogados y políticos que - debido a su naturaleza despreciable y a la peligrosa ideología que profesan - falseaban informes para dar sustento a esas acusaciones que (no se lo pierdan) no sólo aprovechaban los múltiples agujeros legales que ofrece la lamentable ley de violencia de género, sino que dando un paso mas, ponían a los inocentes padres ante la tesitura de tener que defenderse de un delito de abusos sexuales a sus propios hijos.
Los niños eran literalmente secuestrados por sus madres que, debido a que nacieron hembras, disponían de una credibilidad que se sustraía a sus cónyuges.
Todo muy edificante.
Les proporcionaban refugios donde la policía no podía encontrarlas pese a que sobre las secuestradoras, una vez probada la falsedad de las acusaciones, pesaban ordenes de captura.
En el momento de escribir estas líneas, el psiquiatra principal de la trama mafiosa, que hemos sabido que era asesor de Zapatero en materia de violencia de genero, sigue en la calle ejerciendo su profesión en vez de estar meditando en Soto del Real.
Las secuestradoras campan a sus anchas por aquello de que la justicia, como norma en España, procede con una lentitud exasperante...
Nada, absolutamente nada, en esta caterva de malnacidos es defendible.
No me cabe duda de que - al final - la trama será desmontada y de una forma u otra, los responsables de esta cosa vergonzosa terminarán en la trena... pero mientras tanto, aquellos que apoyaron y subvencionaron esta actividad delictiva están haciendo aquello de "a mi que me registren".
Y puedo entender que una banda de criminales engañe a las instituciones para obtener de ellas una ventaja económica, pero lo que no puedo soportar es que tras destaparse algo tan escandaloso como esto, no se esté exigiendo al Estado que revise las subvenciones que da, a quien se las da, y que hacen con ellas.
Porque si los responsables de decidir que se hace con las subvenciones no reciben un tirón de orejas, y no se produce un replanteamiento integral de la distribución de ese dinero, dejaremos de hablar de desidia para empezar a hablar de complicidad.
Y eso es lo peor, porque aquí lo que se percibe, es que la maquinaria de trincar, de robarle la cartera al contribuyente, de hacer que parientes y correligionarios vivan sin dar palo al agua, se articula sobre el Estado y sus representantes "libremente elegidos".
El experto mundial en diluir dinero público - sin lugar a dudas -  es el PSOE, con el PSOE de Andalucía a la cabeza como encargado de impartir los masters en fraude.
Al ser expulsados de la "Junta", nos hemos encontrado ante una sofisticada organización cuya finalidad era distribuir nuestros impuestos entre sus amigos.
Como muestra valga el botón de la "Agencia de Instituciones Culturales" (creada por la Junta de Andalucía en su larguísima etapa socialista) en la que con 483 empleados y 24 millones de euros de presupuesto, se destinaba dieciocho millones a pagar sueldos, cinco mas a sostenimiento de la infraestructura y uno, solamente uno, al desarrollo de la actividad que justificó su creación.
Veintitrés millones de euros diluidos en colocar amigos y parientes... y no es la única.
De las asociaciones para "visibilizar" cosas o dar "chocho-charlas" (y no invento nada) prefiero no hablar.
Infancia Libre no habría podido recibir subvenciones si el grifo público hubiese estado sujeto a un control riguroso en manos de personas honradas...
Pero no es así... ni rigor, ni control, ni personas honradas.
Y eso hay que cambiarlo.
Aunque sólo sea para evitar que proliferen las "asociaciones" como "Infancia Libre".

viernes, 21 de junio de 2019

Manadas y manadillas

Tras un montón de años (tres al menos) la famosa "manada" de los sanfermines ha sido condenada a 15 años de cárcel.
No voy a ser yo quien defienda las abominables prácticas de estos desgraciados, pero creo que debido a la presión de los grupos feministas, se les ha sometido a una sobre-exposición mediática que no se aplica a otros grupos con delitos similares o peores.
En el caso de "la manada", la mayor parte del tiempo se estuvo tratando de dirimir si el delito cometido era abuso o agresión... básicamente porque es muy distinto que sea una cosa u otra y porque, parece ser, había indicios que apuntaban a que - hasta cierto punto - la muchacha colaboró con los desaprensivos.
Como no sé hasta que punto fue una cosa u otra, dado que no vi las pruebas ni pude estar presente en el juicio, doy por bueno lo que los jueces han dictaminado... pero una cosa es cierta: en este caso ha habido división de opiniones desde el principio.
No sucede lo mismo con los MENAS (menores no acompañados) que saliendo del centro de acogida se dedicaron a violar a una muchacha tras meterle una paliza de muerte a su novio (en el metro de Barcelona, ¿recuerdan?)... aquí no hubo alcohol ni ambiente festivo, no cabía duda sobre si el delito era abuso o agresión, pero de esta manada marroquí, no se ha hablado apenas.
Y no ha sido un hecho aislado, esto mismo se ha repetido ya en varias ocasiones, en diferentes lugares de España, durante festejos populares o no, desde que saltó a la luz lo de la manada... con un denominador común: inmigrantes y silencio mediático.
No ha habido manifestaciones de feministas ni amenazas a jueces, no ha habido tertulianos diciendo las habituales estupideces o repitiendo machaconamente las consignas... como son inmigrantes no se puede hablar mal de ellos bajo pena de ser tildado de racista, xenófobo o cualquier otra lindeza.
Y no, no soy racista ni xenófobo, si los agresores son gitanos, marroquíes, ecuatorianos o del barrio de Salamanca, blancos, negros, cristianos, musulmanes o budistas me da igual... sobre los responsables de un hecho tan abominable debe caer todo el peso de la ley y hacerlo sin miramientos.
Es así de simple.
Porque "la inmigración" - aunque ustedes no lo crean - no existe.
La inmigración no es un ente que se pueda tratar en su conjunto.
Existen "los inmigrantes", uno a uno, caso a caso.
Existen personas buenas, malas y regulares y su existencia no depende del lugar donde nacieron, el color de su piel o la religión que profesen...
Y si que quiero hacer una reflexión con la que probablemente usted estará de acuerdo: en España tenemos ya demasiados animales como para importarlos de otros países.
Nunca me ha molestado "la inmigración".
En un país con déficit de natalidad desde hace décadas, recibir inmigrantes no solo es bueno, es necesario... pero tenemos que controlar lo que importamos.
Todo el que venga a ganarse el pan debe ser bien recibido, pero siempre que se lo gane como nos lo ganamos los demás, los que llevamos cincuenta años creando las condiciones necesarias para que ahora, el recién llegado, se beneficie de lo que hemos levantado con nuestro esfuerzo y nuestros impuestos.
Si vienes a vivir de la subvención sin aportar nada a la sociedad que te acoge, a crear ghetos, a rechazar las oportunidades que se te ofrecen o a delinquir: lo siento mucho, pero no te queremos aquí.
Es así de fácil.
Harían muy bien los tontainas del buenismo en entender que lo que produce el rechazo al inmigrante es precisamente este tipo de inmigrante.
Devolver a los criminales a sus países de origen no es xenofobia, es sentido común.
Sólo lamento que no podamos hacer algo parecido con los criminales autóctonos.

martes, 18 de junio de 2019

Rien ne va plus

No puedo quitarme de encima la sensación de que en España el principio de que los ciudadanos deciden como deben ser gobernados mediante los comicios es - simplemente - mentira.
El español de a pie emite su voto y, una vez contabilizado, se sienta en el anfiteatro a presenciar un sainete que, si no fuera por las repercusiones que sobre su vida tiene lo que suceda al final del tercer acto, sería divertidisimo.
El tema se vuelve mas entretenido cuantos mas actores intervienen en el esperpento.
De ese modo las rencillas, pactos, alianzas y traiciones se multiplican ante nuestros asombrados ojos que, cuando emitimos el voto, no podíamos prever que poníamos en marcha un proceso tan complejo.
El espectáculo circense está siendo tan brillante que estoy empezando a pensar que lo de la segunda vuelta francesa no es una idea tan descabellada.
Acepto que esa medida constriñe la política de un pais a una suerte de bipartidismo... pero - en cualquier caso - la decisión de quienes van a pisar las respectivas moquetas recaería sobre el ciudadano y no sobre los partidos políticos.
Para que ello fuese, siempre en mi opinión, rentable, tendríamos que modificar algunas premisas.
Para empezar sería necesario que los políticos asumiesen que cuando acceden al gobierno su obligación es atender las necesidades de todos los españoles, incluso los que no les han votado... manifestando un respeto escrupuloso incluso por aquellos que les son antipáticos.
También sería necesario que se alcanzase un consenso sobre la educación en el que quedase nítidamente claro que la formación se imparte en las escuelas y la educación en casa.
Cualquier atisbo de ideología ya sea partidista o de genero debe quedar fuera de la ecuación educativa... en la escuela se enseña geografía, matemáticas y cosas así, el resto se adquiere en casa.
Los profesores que imparten ideología en vez de formación deben perder la condición de profesor inmediatamente... las que dicen que los niños deben ser castrados, directamente a la cárcel aunque sean concejales del PSOE en Fuerteventura.
Ni que decir tiene que los partidos que no están dispuestos a obedecer las leyes deben ser ilegalizados y se debe impedir a toda costa que obtengan alguna representatividad o capacidad de decisión sobre el conjunto.
De cierto nivel administrativo para abajo, todo debe depender de la meritocracia. Se debe acceder por oposición y hay que crear cuerpos de funcionarios apolíticos que sólo respondan de la correcta gestión de los recursos.
Admito que para ser alcalde de un pueblo no se necesite una licenciatura, pero para ser ministro del gobierno sería necesario un doctorado (uno de verdad no como el de Pedro Sánchez)... o en su defecto un curriculo brillante y - sobre todo - verdadero.
A todo aquel que maneje fondos públicos hay que exigirle un escrupuloso respeto por nuestros bolsillos... y hacerle responsable civil y penal de las malversaciones.
La ley debe impedir los abusos derivados del poder.
En Francia, por ejemplo, contratar parientes es una forma de nepotismo que conduce a la carcel... no entiendo que aquí se permita favorecer a la familia con cargos, sueldos y contratos sin que pase nada.
Si delimitamos aquella parte de nuestra sociedad que puede ser modificada por nuestros políticos sin consultarnos antes, un sistema de doble vuelta no sería tan malo.
Por lo menos tendríamos una idea de lo que van a hacer con nuestro voto.
Hasta que esto suceda, yo - con mi voto - apostaré en la ruleta a negro, par y pasa.
Rien ne va plus.



sábado, 15 de junio de 2019

Mercadeo

Hace poco escuché, en un video de esos que te llegan a través de las redes sociales, a un periodista que hacía una reflexión bastante acertada.
Venía a colación del empeño que tiene todo el mundo en clasificar a Vox como partido de ultraderecha cuando - en realidad - un análisis superficial de su programa permite, sin necesidad de interpretaciones retorcidas, situar al partido de Abascal en el espectro de la derecha conservadora tradicional.
Decía el periodista que este empeño en alterar la imagen pública de Vox ha sido el ariete usado por la izquierda para quebrar a la derecha.
Y los partidos "civilizados" (lease PP y Cs) han sido tan idiotas de caer en la trampa de asumir este argumento. Algo menos el PP y mucho Ciudadanos.
El truco del almendruco está en que desde el momento en que se admite que Vox es un partido de "ultraderecha", se complica enormemente para los partidos que se autodenominan "de centro" la posibilidad de llegar a acuerdos con dicha formación.
De ese modo, el PSOE, que no tiene complejo alguno para pactar con partidos de declarada índole revolucionaria y de ultraizquierda (Podemos, la CUP, ERC, BILDU, etc), sustrae a los partidos "de centro" la posibilidad de alcanzar acuerdos que lo desplacen del poder.
Es así de simple.
De modo que, o PP y Cs cambian el "chip", o ya pueden irse preparando para pasar en la oposición los próximos veinte años... porque votos, lo que se dice votos, no hay para conformar una mayoría ajena a pactos.
De los partidos del bloque que respeta la ley, el que lo tiene peor es Ciudadanos.
La "nueva política" que traían Ciudadanos y Podemos para terminar con el bipartidismo, se está manifestando como un "mas de lo mismo" pero a lo loco.
Esa propuesta de gobernar en Madrid dos años tu (PP) y dos años yo (Cs) que ha hecho Villacís a Almeida, roza lo esperpéntico en materia de gobernabilidad y manifiesta claramente el respeto que "la nueva política" tiene por los españoles... revelando de camino que el deseo de "pisar moqueta" a toda costa es, al final, el objetivo de la "nueva política".
Me resulta sorprendente que los constitucionalistas asuman mansamente que es normal que el PSOE pacte con quien haga falta, y se planteen que tienen un cierto grado de responsabilidad en "evitar" que lo haga con los enemigos declarados de España.
Este planteamiento conduce a interiorizar la creencia de que el PSOE es libre de pactar con quien quiera pero yo no... democracia de dos velocidades, política de embudos a favor de la izquierda, mucho complejo y grandes dosis de estupidez.
La presión de Francia sobre Ciudadanos con la amenaza de expulsarlos de grupo "europeo" en el que se encuadran si pactan con Vox, añade un punto de esquizofrenia a todo esto.
Nunca había sido tan patente la intromisión de un país ajeno en la política interna de otro... y, sinceramente, no sé si dejarse influir por Francia a la hora de tomar decisiones es una buena idea.
Y no lo digo solamente por que Francia sea un país con el que - desde siempre - hemos tenido diversos conflictos de intereses, sino por el hecho de subordinar a "Europa" (ese lugar donde cada vez pesamos menos) las decisiones sobre nuestro bienestar.
Puedo admitir que se produzca un pacto entre formaciones políticas para darle una alcaldía a un partido que no ha alcanzado la representación necesaria, pero siempre que ese pacto no sea "contra natura", es decir, contra los intereses de tus propios votantes o, peor aún, cuando ese pacto se usa como moneda de cambio.
Porque si el pacto consiste en que se cede la alcaldía de la ciudad en la que vivo a mi adversario ideológico para que éste apoye a los míos en otro municipio... que quieren que les diga, de ninguna manera puedo estar de acuerdo.
Y eso es exactamente a lo que están jugando con nuestro voto.
El suyo y el mio.

miércoles, 12 de junio de 2019

Gobierno de gobernación

Cuando se quiere cambiar la percepción de la realidad hay que empezar por el lenguaje.
El lenguaje es el mecanismo que nos relaciona con la información que recibimos... y si queremos manipular la información, hay que elegir (o inventarse directamente) las palabras con las que la transmitimos.
Aparecen así perversiones lingüísticas universalmente aceptadas que suavizan o blanquean conceptos que, de ser llamados por su nombre, se darían de boca con un rechazo generalizado.
En España, la izquierda es la que se dedica en cuerpo y alma a esta actividad.
Los efectos de cualquier fechoría que cometan pueden ser minimizados si la maquinaria mediática de comunicación social altera el lenguaje.
Así, aceptamos que se hable de "género" en vez de hablarse de sexo.
Sexos hay dos y "géneros" los que usted quiera, pero a la hora de criminalizar a un sexo se habla de "violencia de género", que es una violencia que únicamente puede ejercer el género que coincide con el sexo masculino.
Al acto criminal de matar a un ser humano en la fase mas temprana de su desarrollo se le denomina "interrupción voluntaria del embarazo", que suena mucho mejor que "abortar" y confiere a esta atrocidad la apariencia de no estar haciendo nada malo.
Al hecho de que un grupo de asesinos se reúna para matar inocentes por razón de ideología, raza o religión, no se le llama terrorismo, se le denomina "lucha armada", que es un término mucho mas aceptable aunque en esa "lucha" sean siempre los mismos los que portan las armas y también sean siempre los mismos los que ponen las nucas.
A imponer a tus conciudadanos de forma ilegal lo que no has podido conseguir mediante los mecanismos previstos para ello, se le denomina "derecho a la autodeterminación", que suena a cosa estupenda aunque el ejercicio de este "derecho" conculque, de facto, todos los derechos habidos y por haber de los ciudadanos que no piensan como tú y que, al contrario que tú, se ciñen a la ley.
España no es una Nación, es una "Nación de naciones" que suena muy multicultural pero esconde la percepción de que no existe un Estado al que subordinarse.
Los mas egoístas de la sociedad, los que nunca mueven ficha para ayudar a los que lo necesitan, se auto-denominan "solidarios"... quizá porque el acto de "solidarizarse" no implica rascarse el bolsillo o arrimar el hombro.
En España no hay taifa autonómica que no recurra a la solidaridad para ocultar su abyecto comportamiento.
El término "cordón sanitario" implica que los que se encuentran a un lado de él son gente sana y los que están al otro apestados de los que hay que mantenerse alejado... en España los carnets de sano los reparte la izquierda y los compra el "centro", la derecha siempre está en la zona a aislar.
Poco a poco, nos van imponiendo un lenguaje que permite manipular la percepción de la realidad para conseguir que no haya nada que nos altere el pulso... que cualquier aberración sea fácilmente digerible.
La corrección política se convierte en una suerte de religión en la que los que nos negamos a encorsetar nuestras mentes con sus postulados, somos los herejes.
Y no crean, esta nueva religión está llena de inquisidores voluntarios y fanáticos delatores que, bajo la bandera del "progreso", nos están llevando a una suerte de dictadura del pensamiento que ya hubieran querido conseguir las sombras del medievo (luminosas sombras si se me permite compararlas con el "progreso" al que nos llevan).
De modo que le pido encarecidamente que no caiga usted en la trampa.
Para hablar español hay un diccionario y en él se plasma el significado de las palabras.
No se dejen manipular.
Un gobierno de coalición implica la unión de formaciones políticas para compartir responsabilidades... un "gobierno de colaboración" es una inmensa nada envuelta en bonitas palabras.
Hasta ahora ese término vacío de contenido, esa estupidez que nos sume en la indefinición política, esa asociación de palabras que permitirá al PSOE hacer lo que le venga en gana, no existía.
Pero no se preocupen, de hoy en adelante, van ustedes a escucharlo hasta que le sangren los oídos.

martes, 11 de junio de 2019

Tu la llevas

La nueva línea de ataque de la maquinaria orwelliana de la izquierda, es hacer llegar a la sociedad que el PSOE debe recibir los apoyos que sean precisos para poder gobernar sin necesidad del recurrir a pactos con los grupos anti-españoles, anti-constitucionales, golpistas, filoetarras, o pro-narcodictadores.
Esta línea se sustenta sobre la inapelable realidad de que el PSOE es un partido que, con tal de gobernar, es capáz de prenderle fuego a España.
Pronunciarse en el sentido de "evitar" que el PSOE gobierne con los enemigos del Estado, lleva implicito afirmarse en el convencimiento de que - llegado el caso - el PSOE va a pactar con ellos.
En un siniestro ejercicio de cinismo, el PSOE pretende culpar a los demás de las vergonzosas cesiones que está dispuesto a hacer a los dinamiteros... si no me dejais gobernar "no me va a quedar otro remedio" que pactar con los representantes de los asesinos y los golpistas.
Y la derecha, que no es mas tonta porque no entrena, está dispuesta a comprar el argumento.
Lo cierto es que da igual que Pedro Sánchez gobierne sólo o con Pablo Iglesias y sus amigos los golpistas.
Da igual porque el gobierno de Pedro Sánchez no garantiza una línea clara, una estrategia de futuro, un plan a largo plazo... ni tan siquiera garantiza que todo lo que tratamos de evitar prestándole apoyo no vaya a materializarse.
Pedro Sánchez gobernará "al día" dejánadose llevar por "no se sabe qué" para mantener su ego a la altura de su satisfacción personal.
Y como carece de palabra, desconoce la verdad, no tiene escrúpulos y es campeón mundial de hedonismo, prestarle apoyo o no, es indiferente.
Así que la "derecha" haría bien en no comprarle esa mercancía averiada al partido español de todas las traiciones.
Si el PSOE quiere pactar con los asesinos de ETA y sus cómplices, si quiere hacer cesiones a los golpistas, que lo haga.
Pero que no cante milongas... y mucho menos nos haga a los demás responsables.

jueves, 6 de junio de 2019

Estado de desecho

Una de las cosas que más me llama la atención de este Estado de las Anomalías que vivimos en España es la zafiedad, el descaro y la impunidad con que actúan aquellos que están por la labor de destruir nuestro Orden Constitucional.
Y es algo muy anómalo porque resulta que, desde que nos dimos esta Constitución, nos obligamos a que todas las demás leyes derivasen de ella.
Quiero decir con ésto que siendo la Constitución, aunque nos pese, la norma capital de nuestra sociedad, la cima de la pirámide jurídica, la ley de leyes en España, no se comete - al atentar contra ella - un delito cualquiera.
Imaginen ustedes que yo lideráse un grupo de personas dispuesto a no acatar el Código Penal en materia de delitos de robo y, para manifestar mi desacuerdo con la norma me dedicase a esconder y proteger ladrones de bancos, ¿entenderían ustedes que se me dejase obrar impunemente?
Bueno, pues voy aún mas lejos, ¿imaginan ustedes que no solo se me dejase obrar impunemente sino que, además, pusiesen a mi disposición una docena de policías para que me protegiesen?
En el momento de escribir estas líneas hay unos cuantos delincuentes a punto de ser condenados a penas de cárcel por delito de rebelión, pero el jefe de la banda está disfrutando de una lujosa vida en Waterloo ¡Con una escolta de catorce mossos de esquadra!
Tanto a los mossos como al criminal los estamos sosteniendo con nuestros impuestos... ¿no les parece una aberración?
Además, hemos consentido que el "capo dei capi" se presente a las elecciones como eurodiputado español pese a ser un fugado de la justicia... lo cual da un nuevo sentido a quien puede ser y no representante del nuestro pueblo en las instituciones europeas.
El esbirro declarado del delincuente en rebeldía, el "pata negra" de la raza catalana, el jefe del kukluxklan de la butifarra, Quim "Adolf" Torra, es el representante de nuestra Constitución en Cataluña.
Su cargo emana de ella... y su obligación es respetarla y hacerla cumplir en la circunscripción a su cargo.
En vez de eso se dedica, de forma pública y notoria, sin disimulo alguno, a derivar fondos del erario para favorecer a quienes pretenden subvertir el ordenamiento jurídico español.
Cuando menos, en mi humilde entender, podría acusársele de malversación de fondos públicos ¿no?... pues no pasa nada.
Ayer se reunieron representantes de las autonomías catalana y vasca para montar un "frente común" (sic) contra el "estado español".
Y la fiscalía mirando las nubes.
El presidente del gobierno en funciones calentando paños.
Los socios de Pedro Sánchez apoyando - desde el Congreso - a los delincuentes confesos.
La oposición haciendo cábalas con la calculadora para ver quien se queda la alcaldía de Vitigudino.
Y los únicos que han propuesto la ilegalización de los dinamiteros, que se han personado en el juicio a los rebeldes, que defienden a capa y espada nuestro ordenamiento jurídico, tras el cordón sanitario...
De locos.
Cuando Junqueras, los Jordis y demás componentes de la banda de Puigdemont sean condenados a penas de cárcel por delitos de Rebelión (si se da el caso) ¿Aceptarán los tribunales europeos esta decisión?
Porque no aceptarla es hacer una declaración explícita de que un socio de la UE no reúne las condiciones necesarias para serlo... ni para pertenecer a la zona Schengen.
Dicho de otro modo, que en España no hay "Estado de derecho".
Y yo, por los motivos expresados aquí, no voy a tener mas remedio que darles la razón.
En un "Estado de Derecho", todo el mundo, todo, sin excepción, está obligado a cumplir la ley.
Y sus ciudadanos la defienden.
¿Es nuestro caso?

miércoles, 5 de junio de 2019

Vuelta a la normalidad

Poco a poco España vuelve a la normalidad.
Ya hemos salido de la interminable campaña electoral y cada cual ha vuelto a sus quehaceres.
Se nota que hemos vuelto a la normalidad en que el ejecutivo entrante se ha volcado en los temas mas urgentes y de mayor calado para los proximos veinte años: está dirimiendo que hace con los huesos de Francisco Franco.
Por su parte, los colectivos LGTB, reclamando su porción de pesebre estatal, apoyan al marido de Begoña intentando doblegar la voluntad de Ciudadanos.
Ya han declarado que negarán al partido de Alber Rivera una carroza en el día del orgullo gay si se sienta a hablar con Vox.
Asumo que los políticos de Ciudadanos estarán muy preocupados por no poder subirse a un remolque y enseñar las nalgas, que es, basicamente, lo que se hace en esas carrozas.
De modo que, en materia de pactos, podemos esperar lo peor.
Pablo Iglesias, gracias a Dios, ha dado con el responsable de la debacle electoral de Podemos... y sin esperar a una nueva convocatoria de sus bases con las que seguramente podrá llenar entre un quince y un veinte por ciento del Estadio de Vistalegre, ha destituido fulminantemente a Echenique.
A mi se me antoja que el argentino desagradecido que defrauda a hacienda algo de culpa tendrá, pero - tambien en esto - Pablo Iglesias se ciñe a la tradicional aplicación marxista de la autocrítica, que consiste, basicamente, en defenestrar al que recoge los cafés.
La Fiscalía pide que se aplique el delito de Rebelión... argumenta la violencia de forma impecable y contundente, pero la Abogacía del Estado, siguiendo los dictámenes de su amo, niega la mayor para pedir "solamente" sedición.
Es reconforntante constatar que Pedro Sánchez defiende a capa y espada a los españoles... aunque se agradecería que no limitase su defensa a los españoles que no quieren serlo.
Torra está entrando en pánico porque se le está vaciando la caja de payasadas, y a su mundo de coloridos arcoiris y unicornios blancos cada vez entra menos gente (medio millon menos en las últimas elecciones)... de modo que debemos estar atentos a ver que nueva afrenta descubre que le estamos haciendo "los españoles" que, como todo el mundo sabe, no tenemos otra finalidad en esta vida que fastidiar a "los catalanes" (entendiendo por tales a los habitantes de Torralandia).
De modo que ya han vuelto las aguas a su cauce.
Usted tranquilo... estamos en buenas buenas manos.
Si no lo ha hecho aún, vaya sacando la cartera porque alguien tiene que pagar las copas, y como al pobre Echenique le han cesado, creo que vamos a ser usted y yo.


martes, 4 de junio de 2019

Inasequibles al acuerdo

La reunión de la Comunidad de Propietarios se pudo poner en marcha en segunda convocatoria.
Como era de esperar, en primera convocatoria no había quorum y, pese a que en el breve intervalo de tiempo que separaba la primera de la segunda sólo se personaron dos vecinos más, se pudo empezar la reunión sin alcanzar la presencia vecinal exigida en primera instancia.
Tras una breve exposición de los temas a tratar se dio la palabra a los vecinos...
La reunión que tenía prevista una duración de cuarenta minutos superó las dos horas, y sólo se pudo alcanzar un acuerdo sobre uno de los seis puntos del Acta de Convocatoria.
Uno de los cinco puntos restantes no se aprobó (algo que en cierto modo tambien es un acuerdo) y los demás sufrieron dilaciones temporales que navegaban entre consultas legales y solicitud de nuevos presupuestos.
Las decisiones necesarias para acometer los problemas que motivaron la reunión siguieron en el limbo de las decisiones no tomadas, y los problemas, que ya eran de urgente resolución, pasaron a adquirir el status de acuciantes.
Con eso y todo, lo peor fue tener que soportar las intervenciones de los vecinos.
Hubo de todo.
Desde el vecino cuya única finalidad era demostrar lo cualificado que estaba y lo mucho que sabía de los temas tratados, sin - por supuesto - aportar nada a la solución, hasta el que parecia dispuesto a poner en solfa hasta la ubicación de los meridianos.
Se discutió de lo lindo con un acaloramiento que rozaba la pelea de gallos y, una vez mas, se obtuvo el resultado deseado: no hacer nada.
Salvo que usted viva en mitad de un páramo, en lo que ahora se denomina una vivienda unifamiliar, habrá sufrido experiencias similares a las que describo.
No sé si en el resto del mundo sucede lo mismo, ya que mis conocimientos al respecto se limitan a España, a la Ley de Propiedad Horizontal, y - dentro de ella - sólo en aquello que afecta al Presidente de una Comunidad de Propietarios, cargo que desempeñé en mi urbanización en una época de mi vida en la que tenía mas ánimo que cabeza... pero me dá que no.
Me dá que en España, dada nuestra particular configuración genética, lo de tomar decisiones mancomunadas es algo que - de haberlo sabido Dante - lo habría incluido en algún círculo del Infierno (entre el cuarto y el quinto probablemente).
Han pasado ya nueve días desde que se manifestó la "voluntad popular" en materia de euro-parlamentarios, taifas autonómicas y ayuntamientos.
En estos nueve días nuestros representantes electos han dejado claro que en materia de interpretación de nuestra voluntad van de suspenso.
Tal y como se ha planteado la campaña electoral, daba la sensación de que Ciudadanos estaba por la labor de echar a la izquierda radical (que es aquella parte de la izquierda que vá desde Pedro Sánchez hasta Josu Ternera) de las instituciones... pero parece que la inapelable realidad aritmética les está haciendo cambiar de opinión.
La voluntad de los españoles que votaron a Ciudadanos era, insisto, poner coto a los desmanes del recién creado Frente Popular... y creo que los que votaron al PP y - con más énfasis en ello - los que votaron a Vox, tenian la misma intención.
De modo que cuando Ciudadanos se pone a trazar lineas rojas con sus posibles aliados, le está tomando el pelo a sus votantes.
Es así.
Por otro lado, Vox solicita ser escuchado y que se tengan en cuenta algunas de sus propuestas... y no me parece descabellado que intente hacer valer la voluntad de sus dos millones y medio de votantes.
Creo que - en este caso - Vox no pide nada raro.
Otra cosa será que las negociaciones den mas o menos fruto... pero negociaciones tiene que haber.
De modo que si las esperanzas de llegar a un acuerdo que expulse a la izquierda depredadora de las instituciones se truncan, el responsable va a ser el que se niega a hablar, ¿no le parece?
A ver si al final, ademas de extrema-izquierda y extrema-derecha, vamos a tener que empezar a hablar de extremo-centro.

domingo, 2 de junio de 2019

Corrupción

La corrupción forma parte de la política y por ende de la democracia.
Como dice mi admirado Aquilino, la corrupción es el lubricante de las democracias...
No debemos escandalizarnos por ello.
Ortega y Gasset decía que tendemos a tomar como referencia el "ideal" en vez de centrarnos en el "arquetipo".
El "ideal" de político es ese hombre honesto, padre de ejemplar, deseoso de llevar el bien a la sociedad con su inagotable esfuerzo... el "arquetipo" es el principe de Maquiavelo.
Hacemos mal en exigir a nuestra clase política que sea honesta y desinteresada.
Es un error pretender que anteponga nuestros intereses a sus ambiciones.
Es de ilusos pensar que, en la España de los sufragios, donde los gestos dramáticos importan mas que los programas políticos (que nadie lee), donde se apela al miedo y al odio para obtener el voto, donde el cumplimiento de las promesas electorales es una utopía que nadie está dispuesto a alcanzar, podamos tener políticos de altura.
Yo no me asombro ni me escandalizo cuando me entero que Jose Luis Rodriguez Zapatero empezó a negociar con ETA durante el Gobierno de Aznar, ni que le ofreció (como así ha venido siendo) toda suerte de prebendas entre las cuales estaba la innecesaria legalización de Bildu, el acercamiento de los asesinos vascos, la liberación de sus mas sanguinarios dirigentes, el entorpecimiento de las labores policiales en España y Francia, el estudio de una forma alternativa de financiación para la banda terrorista, etc.
No me asombro.
Lo que me asombra es que tras conocerse estos hechos no se produzca reacción alguna.
Durante los años que pasé en Sevilla en no pocas ocasiones, ante la evidencia de que se estaban cometiendo tropelías por parte de la Junta de Andalucía, di con bastante gente que justificaba esa corrupción.
Cuando les acorralabas dialécticamente, ante la imposibilidad de argumentar a favor de cualquier desmán, terminaban diciendo aquello de que "ya era hora de que robasen un poco los míos".
Los míos.
Porque cuando se cruza el Rubicón de identificarse con unas siglas, con una ideología, hasta el extremo de aceptar mansamente cualquier cosa que hagan sus representantes, de dar por buena la prevaricación cuando la cometen mis amigos, pasa uno de testigo a cómplice.
Somos nosotros los que, acostumbrados al abyecto comportamiento de nuestros políticos, hemos ido bajando el listón de nuestras exigencias... hemos aceptado que nos roben y que nos mientan porque, seamos sinceros, ya ni siquiera nos engañan, sólo nos mienten.
No es la corrupción.
Es la renuncia a combatirla lo que nos conduce al abismo.

sábado, 1 de junio de 2019

Verónica

Veronica se quitó la vida.
No pudo soportar la vergüenza y humillación que le producía la difusión de un video de contenido sexual que había grabado con un hombre años atras.
La reaparición del video, compartido a través de las redes sociales en su entorno laboral, fue el detonante de su decisión.
Casada, madre de dos niñas pequeñas, consciente de que ese video le iba a perseguir de por vida, Verónica optó por la solución que nunca lo es.
Confluyen en este caso varios factores que deberían hacernos reflexionar sobre el camino que vamos tomando como sociedad.
El primero de ellos es la negación de la naturaleza humana.
El hombre, desde que adquirió el uso de la razón, ha sido siempre el mismo.
Cambian los tiempos, los hábitos, las costumbres... pero la naturaleza es idéntica.
Mueve al hombre la envidia, el hedonismo, el odio, la lujuria, las ansias de poder, la soberbia, la necesidad de aceptación social, la vergüenza... son sentimientos que le han acompañado desde que el pensamiento se sobrepuso al instinto y que le llevan - en no pocas ocasiones - a la demencia.
El sexo entre un hombre y una mujer es un acto íntimo que sólo produce la satisfacción completa cuando existe una comunión espiritual, cuando lo promueve el afecto, cuando es expresión de amor. Si no es así, el sexo solo crea vacío.
El sexo no es un deporte o una actividad lúdica, es una forma de expresión... y sólo es una experiencia completamente satisfactoria cuando lo envuelve el amor.
Si se produce el desequilibrio, cuando uno de los participantes no forma parte de esta unión espiritual, puede pasar cualquier cosa, pero siempre, siempre, se produce un vacío, una insatisfacción inexplicable derivada de la victoria del instinto sobre la razón.
Y como acto espiritual e íntimo, el sexo necesita privacidad.
Es así.
No estamos diseñados para exponer al mundo esa parte de nosotros que reside en lo mas oculto de nuestra existencia, en ese lugar profundo y confortable al que nos retiramos para afrontar los reveses de la vida o para construir desde él las decisiones que nos mueven.
Veronica, como tantas otras mujeres de su generación, ha sido víctima de la banalización del sexo.
Ese video es una exposición violenta e innecesaria de un acto intimo, no tiene sentido mas que como actividad lúdica, y - sin entrar en otras consideraciones - es un riego inasumible si, como es el caso, eres una persona dotada de unos mínimos de sensibilidad.
Tampoco hay que demonizarlo.
El sexo es lo que es y forma parte de nosotros como cualquier otro instinto, pero tambien, como cualquier otro instinto, hay que mantenerlo bajo el imperio de la razón para sacar de él algo que nos haga crecer como personas... desatar un instinto (cualquiera) no conduce nunca a nada bueno.
Luego hay otra reflexión.
Cometido el error por Verónica, no han faltado miserables dispuestos a explotarlo.
Y lo han hecho por morbo o diversión, ninguno ha sido consciente de que sus actos desencadenarían una reacción tan dramática.
Poco o nada les ha importado que la difusión del video humillase a un semejante.
No sé si tendrán la sensibilidad necesaria para darse cuenta de lo que han hecho, porque vivimos en una sociedad donde todo es confuso y relativo... y cuando el camino no tiene márgenes, no es camino, es desierto.
Verónica creyó a quienes hoy se manifiestan tras pancartas que dicen que se puede hacer cualquier cosa con tu cuerpo sin que eso derive en consecuencia alguna.
Fue una ilusa y pagó un precio muy alto por ello.
Y nosotros tenemos que empezar a tomar cartas en el asunto y exigir que se contemple al hombre en su plenitud, que nos permitan educar a nuestros hijos en principios, que nos dejen desarrollar su espiritualidad...
Lo que llevamos enseñando en los colegios desde hace décadas solo produce desequilibrados, manadas de depredadores, embarazos no deseados y confusión.
Es el precio que estamos pagando por empeñarnos en negar nuestra humanidad.
Y nos conduce a la nada.