jueves, 18 de febrero de 2010

El debate

No he podido recuperarme de la sorpresa… parece ser que lo peor de la crisis ya ha pasado y que vamos (sin prisa pero sin pausa) hacia un futuro prometedor (con paso firme).
Las longanizas para atar a los perros las están fabricando en Jabugo y se precisa la colaboración de los partidos políticos para que no hagan ruido.
El ruido estropea los embutidos y hace que los mercados internacionales, de natural sesteante, se molesten una barbaridad.
Para acometer la tarea de acelerar nuestra evidente recuperación han decidido crear una comisión.
Esta comisión se reunirá con los demás grupos políticos para alcanzar acuerdos puntuales.
¿Quieren que les diga la verdad?... estoy aterrorizado.
Cada vez que estos mantas se reúnen con los demás representantes de si mismos, al erario le cuesta un ojo de la cara.
¿Cuánto nos costará el pacto con el BNG?... ¿Y con ERC?... porque los apoyos de estas minorías irrelevantes (representan a una cantidad irrisoria de españoles) son carísimos.
El debate sobre la crisis (por llamar algo a esa charlotada) no ha decepcionado.
ZP sigue encantado de conocerse y su plan de austeridad consiste en no crear tres ministerios más y contratar seiscientos asesores nuevos, que es lo que le pide el cuerpo.
De la crisis saldremos a golpe de optimismo que, según parece, es el mejor activo de nuestra economía.
De poner en su sitio a las pirañas autonómicas, nada.
De poner en su sitio a las pirañas municipales, nada.
De poner en su sitio a las pirañas de Teddy Bautista, nada.
De evitar que se gaste el dinero en cosas tan importantes como el mapa de no se muy bien que cosa relacionada con el clítoris (y los labios menores), campañas para enseñar a los extremeños a masturbarse, financiar películas que no llegan a exhibirse en las salas y hurgar en las tumbas de nuestros abuelos, por poner algunos ejemplos, no dijo tampoco nada.
De hecho el “gasto social” de nuestros impuestos, sigue “asegurado”.
Subirá el IRPF, subirán el IVA, alargarán nuestra edad de jubilación, los años de cotización… en fin, que tomarán las medidas necesarias para mantener a Aida al frente de un ministerio, al hermano de Carod en una “embajadita” parisina, a la hija de Chavez en una compañía canadiense, etc, etc, etc…
Y para ello necesitan un gran “pacto de estado” que es, según nuestros medios comunicación, la única salida realista a este desmadre…
Al lado de estos tíos una peste negra parece algo apetecible.