domingo, 16 de mayo de 2010

Tensar el foque


Salta la alarma en Ferraz.
Parece ser que a la ciudadanía no le ha gustado aquello de que se haga un recorte de todo menos de lo manifiestamente innecesario.
A los funcionarios le bajan el sueldo una media del 5 por ciento… conozco a unos cuantos que les van a quitar un diez, e incluso un quince, lo que me hace pensar (habida cuenta sus emolumentos) que los afortunados del cinco por ciento van a ser los que tengan los sueldos mas bajos.
Las pensiones se congelan. Se reduce la inversión, se clausuran las ayudas a la maternidad (¿Harán lo propio con las clínicas abortivas?)... llueven chuzos de punta para la clase media y no hay quien los ampare.
Haciendo “zapping” me detengo en la cadena del cinco (¿del cinco por ciento?). Es un programa denominado “la noria” en el que un presentador picado de viruelas hace como que dirige un debate donde se invita a gente como Enrique Sopena y María Antonia Iglesias. En él escucho a Pepiño Blanco negar la evidencia ante la mirada bobina de los entrevistadores.
Las pensiones no peligran, de hecho, congelarlas va a ser bueno… algo así sucede con los funcionarios a quienes con anterioridad se les había subido el sueldo por encima de lo debido. El gasto social sigue siendo (recortado y todo) el mas abultado y progresista de nuestra história. Congelar y reducir es, tal se dirime, la dieta mediterránea que conviene a los grasientos corazones de los empleados del Estado.
La maquinaria de justificar lo injustificable se ha puesto en marcha con implacable disciplina. Engañabobos y asustaviejas a sueldo van a llevarse una semana, una quincena o un lustro, ensalzando las bondades de las improvisaciones de este ser humano con DNI que nos preside.
Y mientras tanto las 17 pirañas autonómicas seguirán derrochando nuestro futuro con la vehemencia de un nuevo rico porque, dado que no quieres caldo, dos tazas parecen lo adecuado… la culpa – a la postre – va a ser de lo muchísimo que nos cuesta mantener esa legión de funcionarios a los que hay que castigar.
Sobran en España muchos funcionarios – estoy de acuerdo - pero casi ninguno de los que sobra ha ganado su plaza en un concurso-oposición. Y de esos, de los que no opositaron ni opositarán nunca, hay cientos de miles.
Miente el gobierno con toda la boca y a todas horas. Mienten sus voceros y quienes les mandan mentir. Mienten mas que hablan con la esperanza de que esas mentiras les conduzcan a alguna parte.
Lo digo, mas que nada, porque esta cabronada (con perdón) que le han hecho a los exudantes sostenedores de la Patia, es sólo la primera de las andanadas que van tirar bajo nuestra línea de flotación.
Con lo dicho no recaudan ni la misa, ni la media… y la subida del IVA, en tanto que se trinca sobre un consumo menguante, ya veremos si da para deudas o para duelos y quebrantos los días que preceden al domingo.
Sólo sé que no saben lo que se traen entre manos… ¿Porqué no se marchan?