miércoles, 16 de octubre de 2019

Unos cuantos violentos

Cuando se producen actos vandálicos, los vándalos siempre son unos cuantos... y si, probablemente los que han ido quemando contenedores de basura desde la Delegación del Gobierno hasta su casa, son unos pocos, pero están protegidos por otros muchos.
Prueba de ello es que antes de las protestas, Torra dio orden a los mossos de precintar el material antidisturbios, que es, como todo el mundo sabe, la medida mas acertada que se puede tomar cuando se preven manifestaciones de la izquierda.
Y perdóneme que insista, pero en las manifestaciones de "la derecha" no se producen desperfectos ni hay cargas policiales... probablemente porque los manifestantes son de otra pasta.
Volviendo al tema, los organizadores de estos saraos son entidades que llevan chupando de nuestros impuestos (a través de la Generalitat) desde hace muchos años.
Omniun Cultural y la ANC - los organizadores del "Tsunami" - son entidades creadas y mantenidas por los del tres por ciento, y reciben ordenes de los políticos separatistas. Son la cadena de transmisión de las consignas de los golpistas y los que aportan a las manifestaciones el  "improvisado" merchandising en forma de pancartas, fotos...
Ada Colau y su equipo de pirómanos, alientan con su actitud que en la ciudad Condal se reúnan toda clase de anormales. El movimiento "okupa", al que tanto cariño demuestra la esteatopígica alcaldesa, ha sido siempre parte de la logística terrorista y antisistema... y, o mucho me equivoco, o este fin de semana, veremos alojados en las comunas okupas a montones de esos "pocos" que vendrán de vascongadas y el sur de Francia (incluso de centroeuropa) a sumarse a la fiesta. Con la bendición, eso si, de las instituciones municipales.
Desde la televisión oficial de Cataluña, bueno, desde las decenas de canales de radio y televisión mantenidas con nuestros impuestos, se llama a la desobediencia y se facilita información de los movimientos de los vehículos policiales.
Para ayudar a imponer el orden, Torra ha ordenado que se investigue el comportamiento de los mossos en el aeropuerto para ver si pueden empapelar a uno o dos... mandando un mensaje de aliento a los que tienen que bregar con los "pocos" que - "pacíficamente" - crean el caos por donde van.
Ayer los separatistas se acercaron a profanar las tumbas del cementerio militar de Barcelona, porque no hay nada que divierta más a un ciudadano de izquierdas que jugar con los muertos ajenos... y como el ejemplo lo está dando el propio gobierno de España, pues eso.
En Lérida quemaron una tienda de Zara, que como todo el mundo sabe son los que han encarcelado a los golpistas.
Y desde "Madrit", Pablo Iglesias y la Televisión publica que le ha regalado Pedro Sánchez, justifican a los manifestantes y minimizan la gravedad de los hechos... porque la izquierda española (no se porqué) siempre simpatiza con el agresor en vez de hacerlo con la víctima.
Pedro Sánchez está encantado de conocerse y observa con plena autosatisfacción lo bien que está gestionando su gobierno "el problema catalán", porque no hacer nada es - para estos zurupetos - "gestionar una crisis".
Resumiendo, desde el gobierno autonómico se dan las ordenes de sembrar el caos ("apreteu, feu be en apretá") y se difunden a través de sus medios de comunicación, el gobierno municipal facilita con su inacción que se desarrollen los acontecimientos, y el gobierno Central dedicado a deshojar la margarita...
Lo de estos días solo ha sido el principio.
Se avecina una mucho peor.
Y con el PSOE en el gobierno de España, nos vamos a reír a carcajadas.