miércoles, 15 de mayo de 2013

Responsabilidad


A una edad muy temprana aprendí de mis mayores que los actos y la responsabilidad van siempre de la mano.
Aprendí que las cosas hay que sopesarlas antes de hacerlas, calcular – aunque sea someramente – las consecuencias que podrían acarrear nuestras acciones y, llegado el caso, asumir las responsabilidades.
En la asunción de responsabilidad siempre vi una virtud, una muestra inequívoca de hombría, de entereza, de valor… lo contrario no era de recibo para cualquiera que aspirase a vivir de pie.
Y casi siempre, en ello había un mucho de actitud personal y un poco de presión social… y hablo de la España que viví en mi infancia que, con sus claroscuros, fue indiscutiblemente mejor que la sociedad porcina en la que sobreviven mis hijos.
Los actos conllevan responsabilidades.
Si bebes mas de lo razonable, lo suyo es que no conduzcas. Porque si coges el coche con los reflejos mermados, te pones en una situación en la que la probabilidad de tener un disgusto adquiere un valor intolerable.
Puede que no pase nada… o puede que sí.
Y si pasa lo peor, si arrollas con tu coche a un inocente… ¿eludirás la responsabilidad?
Y si tratas de eludirla ¿te dejará hacerlo la ley?
Son preguntas retóricas… su respuesta es evidente.
Y no se trata de lo que tu querías que sucediese. Doy por supuesto jamás planeaste verte en ese trance, que no hubo voluntad de dañar, que no eras del todo consciente de lo que pasaba… pero una vez hecho el daño, ¿asumirás la responsabilidad?
La muerte de un inocente pone de acuerdo a todo el mundo cuando de un accidente de tráfico estamos hablando, pero cuando los dados se tiran en otro contexto y el inocente pesa apenas un centenar de gramos, la cosa cambia.
Al igual que con el alcohol y el coche nos encontramos frente una imprudencia, pero en este caso concreto, la sociedad permite la muerte del inocente sin exigir cosa alguna al irresponsable.
¿Somos responsables de nuestros actos? ¿O solo de unos si y de otros no?
Y si eso es así… ¿de que demonios estamos hablando?
Y por último, ¿que pasa con el inocente?