viernes, 8 de junio de 2012

Cocinar un crucifijo

El Juzgado de lo Penal número 8 de Madrid ha absuelto al cantautor Javier Krahe de un delito contra los sentimientos religiosos al "cocinar un crucifijo" en un vídeo, ya que la sala considera que no tuvo intención de "menoscabar, humillar o herir los sentimientos religiosos".

No conozco a Javier Krahe... la primera noticia que tengo de que este pollo ejerce de "cantautor" me la da el párrafo anterior que he extraído de una web de noticias.
Supe en su día que este homínido hizo un video (que emitió el programa "lo mas plus") en el que a modo de Arguiñano progre, explicaba la "receta" de cómo cocinar un crucifijo.
Yo debo ser muy raro, pero a bote pronto se me antoja que si el mentado video no pretende "menoscabar, humillar o herir los sentimientos religiosos", el fracaso del cantautor al filmarlo ha sido estrepitoso... porque el video ofende - y de qué manera - a muchos ciudadanos que tenemos esos sentimientos.
Otra cosa es que este lamelibranquio - dada su aparente condición de tocapelotas y su carencia de sentimientos religiosos - no considere tal cosa ofensiva... pero el video es ofensivo.
El video es ofensivo y es - además - absolutamente gratuito e innecesario.
El video es un insulto deliberado a los católicos, porque para toda esta patulea de anormales, lo de ciscarse en la Iglesia, sus fieles y sus símbolos, es algo así como una obsesión freudiana.
Sucede además que cuando un patán de estos te mete el dedo en el ojo y te quejas, se rasga las vestiduras y es arropado por el resto de la mediática pocilga. Ellos pueden mentar a tu madre, pero tu no tienes derecho aquejarte... es lo que se denomina una democracia a la española.
Yo a este cantamañanas le pediría que ya que es tan original, haga un corto explicando cómo se cocina un ejemplar del Corán, y que su amigo Wyoming lo emita en ese pozo de telebasura que conduce...
Pero no lo harán... estos "valientes" pertenecen a una estirpe tal que sólo se atreven con los niños pequeños. Y como los católicos no vamos a ir a su casa a partirle las piernas por insultarnos... se hacen los graciosos.
Y en cuanto a Su Señoría, ignoro en que recoveco legal se habrá parapetado para emitir semejante sentencia... porque cuando las cosas son de una evidencia semejante, emitir una sentencia absolutoria es un ejercicio de cinismo legal.
Quizá, si el señor Javier Krahe hubiese emitido un video cocinando la foto de la madre de Su Señoría, piensase usted distinto.
¿A que si?