domingo, 21 de agosto de 2011

... y fin.

La JMJ ha terminado a plena satisfacción.
Los católicos estamos satisfechos y la zarrapastra también.
Los católicos hemos pasado unas jornadas de hermandad muy alentadoras… la zarrapastra ha montado su numerito chulesco y neonazi de “la plaza es mía” y “vete de mi calle”, que es lo que les gusta.
Cuando durante dos meses estuvieron ocupando ilegalmente la Puerta del Sol, arruinando a los comerciantes de la zona, meando por las esquinas y exponiendo esa diarrea de todo a cien que pactaban en aquellas asambleas de representatividad cero, nadie se metió con ellos. No hubo grupos de ultracatólicos, ultraderecha, ultra-lo-que-usted-prefiera insultándolos, chillándoles, escupiéndoles… se les dejó hacer lo que quisieron.
Se saltaron la jornada de reflexión (práctica sociata donde las haya) y vulneraron con su mugrienta acampada la ley y el decoro exigible a una sociedad del primer mundo… y nadie les dijo nada.
Es mas, se trató de justificar lo injustificable porque el halo “romántico” de revolución callejera, tenía embelesados a esa legión de tontos que habitan las rotativas españolas.
Se les permitió, siendo cuatro y el gato (por mas cifras que se quieran echar encima) acceder al Congreso… y partidos como Izquierda Hundida apoyaron abiertamente el comportamiento caprichoso y en ocasiones delictivo de los amargados.
Estos días hemos visto a riadas de peregrinos paseando por nuestras calles sin meterse con nadie, rezando, haciendo turismo, comiendo en las hamburgueserías, comprando recuerdos… y han tenido que sufrir la intolerancia chulesca de los amargados del 15 Mugre.
Cierto es que la “manifa” anticatólica en general y antipapa en particular no la convocó el 15 M, pero los disturbios de los días siguientes si.
El 15 M, si en algún momento tuvo cierto prestigio, ya lo ha perdido.
Su cara pública es la del rojerío cutre, chulo y berreón… la de los comecuras de toda la vida.
¿Es aquí donde quería llegar el movimiento 15 M?. Yo creo que no, pero así están las cosas.
Es posible que los mas sensatos se distancien de esta basura… les propongo que monten el movimiento 22 A, una cosa civilizada y tolerante que recoja ese espíritu de cambiar la sociedad sin recurrir al escupitajo, a la chulería y la mugre intelectual… capaz de crear una sociedad donde quepamos todos.
Con un poco de suerte reunirán a los incautos que una vez creyeron que lo del 15 M era una cosa expontánea.