“…En la madrugada del 13 de julio de 1936 un grupo de guardias de Asalto y militantes socialistas, dirigido por el capitán de la Guardia Civil Fernando Condes, que se encargaba de la instrucción militar de la “motorizada”, guardia pretoriana del dirigente del PSOE Indalecio Prieto, le detuvo en su domicilio y le introdujo en el interior de una camioneta de la guardia de Asalto donde Luis Cuenca, militante de las Juventudes Socialistas y también guardaespaldas de Indalecio Prieto le asesinó a sangre fría disparándole dos tiros en la nuca. Inmediatamente después del asesinato el capitán Condes, que fue reconocido por la viuda de Calvo Sotelo, estuvo oculto por una noche en casa de la diputada Margarita Nelken."
[Minuto Digital, Redacción, en el 75 aniversario de la muerte de Calvo Sotelo]
Cuando veo el comportamiento de algunos policías no puedo menos que acordarme de este episodio.
La innecesaria brutalidad (sic) con que se ha tratado a los militantes del PP en Mallorca con objeto de conseguir “la foto” (elemento principal de la maquinaria de agit-prop del desgobierno de España) muestra hasta que punto ciertos perros están dispuestos a obedecer las voces de sus amos.
Se llama prosperar por el método Lewinsky, y dado que es una forma muy antigua de escalar por la pirámide del poder, está presente en todas las instituciones del Estado. No se salvan de estos canallas ni la Justicia, ni el Ejército, ni la Policía, ni – por supuesto – la Política, donde es, además, el único método admitido para el ascenso.
Hay en nuestra policía un sector dispuesto a progresar en su carrera a base de lamer suelas de zapato y, conscientes de que en España el Estado de Derecho es sólo una formalidad, no dudan en hacer cualquier cosa (delitos incluidos) para agradar a los que van a proporcionarles las prebendas. Y si algo sale mal… ya aparecerá algún juez estrella de los que están en "la nómina" para tapar el asunto.
Sánchez-Manzano - sin ir mas lejos - no acude a declarar ante el juez porque está “en un crucero”… cuando regrese, esperándole en el puerto, no habrá dos matones dispuestos a hacerse una foto con el prenda encadenado (tal vez porque la deuda del PSOE con este pavo es enorme).
Vamos a lo de siempre… la izquierda chulesca y matona se ha hecho con el poder y le está dando "pal pelo" a la derechona.
Al día siguiente de la muerte de Calvo Sotelo, Indalecio Prieto, jefe directo de los asesinos del interfecto, escribía en "El Liberal": "La trágica muerte del Sr. Calvo Sotelo servirá para provocar el alzamiento… Será una batalla a muerte, porque cada uno de los bandos sabe que el adversario, si triunfa, no le dará cuartel"... se conoce que el tal Indalecio leía con claridad en los posos del café.
Para rematar la faena, el 16 de julio de 1.936, Largo Caballero, ese hombre de estado tan equilibrado y ecuánime, escribió en el panfleto “Claridad”: “La lógica histórica aconseja soluciones más drásticas. Si el estado de alarma no puede someter a las derechas, venga, cuanto antes, la dictadura del Frente Popular. Dictadura por dictadura, la de izquierdas. ¿No quiere el Gobierno? Pues sustitúyale por un Gobierno dictatorial de izquierdas… ¿No quiere la paz civil? Pues sea la guerra civil a fondo. Todo menos el retorno de las derechas.”
Es lo que tienen los “rojos de solemnidad”... que el stalinismo les pone.
[Minuto Digital, Redacción, en el 75 aniversario de la muerte de Calvo Sotelo]
Cuando veo el comportamiento de algunos policías no puedo menos que acordarme de este episodio.
La innecesaria brutalidad (sic) con que se ha tratado a los militantes del PP en Mallorca con objeto de conseguir “la foto” (elemento principal de la maquinaria de agit-prop del desgobierno de España) muestra hasta que punto ciertos perros están dispuestos a obedecer las voces de sus amos.
Se llama prosperar por el método Lewinsky, y dado que es una forma muy antigua de escalar por la pirámide del poder, está presente en todas las instituciones del Estado. No se salvan de estos canallas ni la Justicia, ni el Ejército, ni la Policía, ni – por supuesto – la Política, donde es, además, el único método admitido para el ascenso.
Hay en nuestra policía un sector dispuesto a progresar en su carrera a base de lamer suelas de zapato y, conscientes de que en España el Estado de Derecho es sólo una formalidad, no dudan en hacer cualquier cosa (delitos incluidos) para agradar a los que van a proporcionarles las prebendas. Y si algo sale mal… ya aparecerá algún juez estrella de los que están en "la nómina" para tapar el asunto.
Sánchez-Manzano - sin ir mas lejos - no acude a declarar ante el juez porque está “en un crucero”… cuando regrese, esperándole en el puerto, no habrá dos matones dispuestos a hacerse una foto con el prenda encadenado (tal vez porque la deuda del PSOE con este pavo es enorme).
Vamos a lo de siempre… la izquierda chulesca y matona se ha hecho con el poder y le está dando "pal pelo" a la derechona.
Al día siguiente de la muerte de Calvo Sotelo, Indalecio Prieto, jefe directo de los asesinos del interfecto, escribía en "El Liberal": "La trágica muerte del Sr. Calvo Sotelo servirá para provocar el alzamiento… Será una batalla a muerte, porque cada uno de los bandos sabe que el adversario, si triunfa, no le dará cuartel"... se conoce que el tal Indalecio leía con claridad en los posos del café.
Para rematar la faena, el 16 de julio de 1.936, Largo Caballero, ese hombre de estado tan equilibrado y ecuánime, escribió en el panfleto “Claridad”: “La lógica histórica aconseja soluciones más drásticas. Si el estado de alarma no puede someter a las derechas, venga, cuanto antes, la dictadura del Frente Popular. Dictadura por dictadura, la de izquierdas. ¿No quiere el Gobierno? Pues sustitúyale por un Gobierno dictatorial de izquierdas… ¿No quiere la paz civil? Pues sea la guerra civil a fondo. Todo menos el retorno de las derechas.”
Es lo que tienen los “rojos de solemnidad”... que el stalinismo les pone.