Dice Gasparín que él “ni respeta ni acata” la sentencia que se ha dictado contra el ex-juez (¡Deo gratias!) Baltasar Garzón alias “prevaricator”.
Como buen stalinista, Gasparín solo “respeta y acata” las sentencias que favorecen a sus amiguetes, porque – como llevamos constatando de unos años a esta parte – la izquierda se puede pasar por el arco del triunfo la ley sin cometer delito... cosa que no sucede con sus oponentes políticos.
Yo, la sentencia del Supremo ni la acato ni la dejo de acatar, porque no la han dictado para que la acate yo, sino para que la acate Garzón, que es el choricete levógiro que ha prevaricado.
En cuanto a lo que ha hecho el Supremo, no me parece nada extraordinario... sólo ha cumplido con su deber.
Pero como Gasparín, si no eructa uno de sus piensos, no puede conciliar el sueño, pues a rebuznar se ha dicho. Después de todo, en España, rebuznar sale gratis.
Cambiando de tercio, me hace caer en la cuenta mi admirado Aquilino, que en las primarias republicanas de América se presenta un oriundo de el Viso del Alcor (provincia de Sevilla).
Eso es porque en este pueblo andaluz los que lucen el apellido “de los Santos” son legión (al igual que los Jiménez, que se dan como las setas en otoño) y el candidato “Santorum”, pese a sus esfuerzos por ocultarlo (usando la acepción latina de su apellido), no puede evitar que lo relacionemos con sus orígenes.
También quiero en esta miscelánea dedicar unas palabras a Canal plus Francia que, con tanto esfuerzo, está tratando de injuriar a nuestros deportistas... cuando injuriar a nuestros políticos sería muchísimo mas fácil.
Si la envidia fuese tiña...