"El Gobierno no ha tenido más remedio que admitir que prepara un paquete fiscal con importantes subidas de impuestos. La razón objetiva está muy clara: el agujero que ha generado el aumento del gasto en las cuentas públicas es insostenible y los contribuyentes tendrán que pagar la errática política económica del Gobierno.
Pero el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no quiere admitirlo y da lugar a justificaciones que rozan lo insólito. En esta ocasión ha argumentado que la subida de impuestos se debe a fenómenos como la “gripe A” y el aumento del paro." [LD, 31/08/2009]
¡Hay que ver lo malas que son las plagas bíblicas!
El Señor, como en Meribá, muestra su poder castigándonos por nuestra falta de fe.
Esta vez no se ha podido incluir en el paquete de cataclismos ni la guerra de Irak ni la foto de las Azores (origen – con base científica de ministra igualitaria – de todos nuestros males)… pero denles tiempo, todo llegará.
De nuestro paro – es evidente – la culpa es de Bush, Aznar, Franco, el Katrina, los neo-con, el calentamiento global (táchese lo que no proceda) y de la subida de impuestos, el paro, la gripe A, el fichaje de Cristiano Ronaldo, el calentamiento global (táchese – nuevamente – lo que no proceda).
Menos mal que Zetapé está al quite y con una maestría digna del faraón de Camas, se está marcando unas verónicas y unos pases de pecho con la crisis, que nos tienen a todos con el pañuelo blanco en la recámara.
En su ayuda, de cuando en cuando, aparece algún profeta del Estado del Bienestar (Alonso por ejemplo) y nos explica que la subida de impuestos es por nuestro bien… que va a beneficiarnos un montón.
Yo, tras la comparecencia, me quedé con la sensación de que estaban pidiendo perdón por no habernos beneficiado antes con esta subida de impuestos… errar es humano y hay que entenderlo.
Cualquier día, con ese gesto grave y engolado que caracteriza a los grandes, grandísimos, hombres de Estado, con la mirada perdida en el horizonte de un futuro cierto, nuestro cejipicudo presidente recitará aquello de:
"Llamé al cielo y no me oyó,
Y pues sus puertas me cierra,
De mis pasos en la tierra,
Responda el cielo, no yo."
J. Zorrilla (Don Juan Tenorio)
¡Hay que ver lo malas que son las plagas bíblicas!
Lo único que me consuela en estos tiempos de gran tribulación es que nuestro gran timonel, José Luis Rodríguez Zapatero, y su avezada y aguerrida tripulación, con mano firme, conducen el barco lejos del finis mundi capitalista… donde los abismos están poblados por enormes serpientes marinas y monstruos mitológicos sin cuento.
Tienen tanto cemento en la cara que no se si les será de aplicación el principio de Arquímedes.
Pero el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no quiere admitirlo y da lugar a justificaciones que rozan lo insólito. En esta ocasión ha argumentado que la subida de impuestos se debe a fenómenos como la “gripe A” y el aumento del paro." [LD, 31/08/2009]
¡Hay que ver lo malas que son las plagas bíblicas!
El Señor, como en Meribá, muestra su poder castigándonos por nuestra falta de fe.
Esta vez no se ha podido incluir en el paquete de cataclismos ni la guerra de Irak ni la foto de las Azores (origen – con base científica de ministra igualitaria – de todos nuestros males)… pero denles tiempo, todo llegará.
De nuestro paro – es evidente – la culpa es de Bush, Aznar, Franco, el Katrina, los neo-con, el calentamiento global (táchese lo que no proceda) y de la subida de impuestos, el paro, la gripe A, el fichaje de Cristiano Ronaldo, el calentamiento global (táchese – nuevamente – lo que no proceda).
Menos mal que Zetapé está al quite y con una maestría digna del faraón de Camas, se está marcando unas verónicas y unos pases de pecho con la crisis, que nos tienen a todos con el pañuelo blanco en la recámara.
En su ayuda, de cuando en cuando, aparece algún profeta del Estado del Bienestar (Alonso por ejemplo) y nos explica que la subida de impuestos es por nuestro bien… que va a beneficiarnos un montón.
Yo, tras la comparecencia, me quedé con la sensación de que estaban pidiendo perdón por no habernos beneficiado antes con esta subida de impuestos… errar es humano y hay que entenderlo.
Cualquier día, con ese gesto grave y engolado que caracteriza a los grandes, grandísimos, hombres de Estado, con la mirada perdida en el horizonte de un futuro cierto, nuestro cejipicudo presidente recitará aquello de:
"Llamé al cielo y no me oyó,
Y pues sus puertas me cierra,
De mis pasos en la tierra,
Responda el cielo, no yo."
J. Zorrilla (Don Juan Tenorio)
¡Hay que ver lo malas que son las plagas bíblicas!
Lo único que me consuela en estos tiempos de gran tribulación es que nuestro gran timonel, José Luis Rodríguez Zapatero, y su avezada y aguerrida tripulación, con mano firme, conducen el barco lejos del finis mundi capitalista… donde los abismos están poblados por enormes serpientes marinas y monstruos mitológicos sin cuento.
Tienen tanto cemento en la cara que no se si les será de aplicación el principio de Arquímedes.