“El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha afirmado que la libertad de expresión es un derecho que no debería servir "para provocar y humillar los valores y las creencias" de otros pueblos, en alusión al vídeo y las nuevas caricaturas que se mofan de Mahoma.” [LD 20/09/12]
De cuando en cuando me sorprendo a mi mismo por estar de acuerdo con declaraciones de personajes con los que tengo poca afinidad.
Hoy es uno de esos días porque, en efecto, Ban-Ki-moon ha dado en el clavo.
Siempre he dicho que el Islam es un problema, pero de ahí a ridiculizar las creencias y los sentimientos de mil doscientos millones de personas, media un abismo.
Porque en esos vídeos que ridiculizan a Mahoma se pasa de debatir sobre creencias a ofender a personas y eso, como cristiano, no puedo admitirlo.
También creo que la reacción de los musulmanes a la ofensa es desproporcionada, pero siempre he dicho que en eso, en la desproporción, radica el principal problema del Islam.
Al final, lo que hay que entender es que las “ideas” no son dignas de respeto, pero las personas si... y la ofensa gratuita no es “libertad de expresión”, es el recurso del que carece de ideas y de argumentos.
Por lo demás, yo quisiera que este miedo reverencial que se tiene a ofender a los musulmanes se trasladase también a otras religiones, como por ejemplo, la mía... porque de un tiempo a esta parte (de un siglo a esta parte), para ofender o matar cristianos vale cualquier credo.