En los años ochenta tuve mi primer ordenador.
Aprendí a programar calculadoras a finales de los setenta (tenía una estupenda de la marca "Texas Instruments") y antes de comprar mi primer ordenador (Uno de la familia MSX) ya era capaz de diseñar algoritmos y traducirlos a GWBASIC que fue el primer lenguaje de programación que aprendí.
Llevo en la informática - como quien dice - toda la vida.
Al terminar mi carrera estuve unos años ejerciendo de usuario "avanzado" porque la programación de ordenadores era, para mi, un fantástico entretenimiento. Toque varios palos y tuve ordenadores que funcionaban con MSDOS y MacOS... luego me pasé a LINUX porque era un mundo por explorar.
Con el tiempo me diplomé en Informática y dedique el resto de mi vida profesional a esta ciencia.
Aprendí a programar en lenguaje C (la madre de todos los lenguajes), hice mis pinitos en lenguaje ensamblador, Visual BASIC, C++... al popularizarse la WEB empecé con JavaScript, HTML (por supuesto), PHP, C# y últimamente Python.
Aprendí SQL para manejarme con bases de datos relacionales, hice interfaces con TCL/TK... como con los idiomas, cuando hablas uno o dos, aprender un tercero es mas sencillo y, en mi caso, las carencias que tengo con los lenguajes naturales las compenso con los binarios.
Creo que sobreviviría al Apocalipsis Zombi en Francés y en Inglés, y no me moriría de hambre en Italiano, pero hablarlos, lo que se dice hablarlos...
Con el paso del tiempo me he visto obligado a profundizar en temas de Ciberseguridad que es - con mucho - la parte mas desagradable de este mundillo.
Soy lo que se dice un maestro de nada que tiene - eso si - una visión bastante clara de como funciona el tema informático.
Y ¿saben una cosa?, cada vez que Tezanos publica una encuesta como la última, se me ponen los vellos como escarpias.
Toda esta introducción la he hecho para comentarles algo que no se puede decir, pero que es real: los pucherazos electorales existen.
Y desde que la informática ha irrumpido en la sociedad, son mas fáciles de hacer.
Es verdad que se levantan actas manuales del conteo de los votos... y que en un hipotético caso de sospecha, se podrían hacer comprobaciones, pero esas comprobaciones llevarían meses de trabajo a un equipo numeroso, y (no les quepa duda) el beneficiario del pucherazo, haría todo lo posible por evitar que ese estudio llegase a buen término.
¿Donde se puede hacer la trampa?, en la transmisión de los datos.
Tras el conteo manual los jefes de mesa acuden a un punto central donde con un terminal se dan de alta los resultados del conteo... esos datos son transmitidos a un servidor que realiza el acopio de los mismos.
El que manda los datos no sabe lo que llega al otro lado, y el que los recibe no sabe que es lo que se ha mandado.
Si hay fraude es ahí donde se produce.
La técnica mas sencilla, y mas probable, es la del "man in the middle", que consiste, en interponer una máquina que recibe los datos, los altera y los hace llegar modificados al otro lado.
Las empresas que se dedican a desarrollar el software para los recuentos están (algunas de ellas) bajo sospecha de tongo (búsquenlo en google) en países de nuestro entorno.
Y desde luego, donde se ha producido - con toda seguridad - es en los países bolivarianos.
No voy a ser yo el que diga que esto ya se ha hecho aquí, no tengo datos para ello, pero les voy a contar un par de casualidades matemáticas que si que se han dado el 28A.
El pasado 28A, los resultados fueron los siguientes:
- PSOE: 123 escaños
- PP: 66 escaños
- Ciudadanos: 57 escaños
- Podemos: 42 escaños
- Vox: 24 escaños
- ERC: 15 escaños
- Otros: 23 escaños
A la vista de los resultados, la primera cosa que llama la atención es que los seis primeros partidos con mas votos, han obtenido un numero de escaños que es múltiplo de tres... lo cual matemáticamente es muy exótico, pues la probabilidad de que esto suceda (que los seis primeros partidos obtengan escaños múltiplo de tres) es del 0,137%, dicho de otro modo, la probabilidad de que NO suceda es del 99,863%.
No obstante, la lotería toca.
Acepto casualidad si usted la acepta conmigo.
Lo que me parece sorprendente es la segunda casualidad...
Estableciendo en 176 escaños la mayoría simple (numero de escaños para gobernar sin necesidad de alianzas) resulta que la suma de escaños de PSOE y Cs da como resultado 180 escaños, y ¿saben cuanto suman los escaños de PSOE, Podemos y ERC?... si, lo han adivinado: 180.
De modo que las alianzas que darían a Pedro Sánchez una mayoría serían claramente PSOE + Cs o PSOE + UP + ERC... porque hay que descartar (por razones obvias) cualquier alianza del PSOE con PP o VOX.
Pero es que además, PP + Cs = 123 (el numero de escaños del PSOE)
Unidas Podemos + VOX = 66 (el numero de escaños del PP)
Unidas Podemos + ERC = 57 (el numero de escaños de Cs)
¿Saben cual es la probabilidad matemática de que esto suceda?
Espero equivocarme, pero no puedo quitarme de encima la sensación de que las encuestas del CIS nos están preparando para otro gordo de la lotería, pero esta vez el de Euromillones.
Ahí lo dejo.
miércoles, 31 de julio de 2019
martes, 30 de julio de 2019
El daño irreparable
Volvieron de Afghanistan en sus ataúdes y fueron recibidos, a las tres de la madrugada, por su familia y una pequeña comisión del ejército.
Habían dado su vida por España (aunque fuese en desiertos lejanos) y se les trajo de tapadillo, sin que nadie se enterase, casi con vergüenza...
La palpable realidad del ataúd quitaba credibilidad al relato de "misión de paz", de reparto de vendas y caramelos, que llevaba al gobierno de Zapatero a duplicar los efectivos que España destinó a una guerra en la que los soldados españoles se hartaron a pegar tiros para defenderse.
Porque los hombres que mandó el hipócrita de las cejas picudas a Afghanistan duplicaban en numero a los que sacó de Irak... pueden comprobarlo.
Fueron a una "misión de paz" si, pero en una zona de guerra, que es donde se hacen estas misiones.
A día de hoy, o eres militar, o no sabes nada de lo que pasó en Irak, Bosnia, Kosovo o Afghanistan.
En la sociedad del "no a la guerra", cuando te derriban un helicóptero con un cohete matando a una docena de españoles, el melifluo Ministro de Defensa de turno acude al Congreso a decir que el capitán que lo pilotaba era un torpe o que se confabularon los hados meteorológicos para provocar el "accidente".
Todo menos reconocer que fueron a una guerra a hacer las cosas que hacen los ejércitos.
Todo menos reconocer que dieron su vida por España cumpliendo un juramento, llevando su sentido del deber hasta donde muy pocos son capaces de hacerlo.
Y sí, era una misión de paz... de pacificación, de imposición de la paz en zonas donde aún sangraban las cicatrices de una guerra.
Zonas donde la paz solo puede imponerse a tiros.
Volvieron de tapadillo, sin mas honores que los que les brindaron sus compañeros de armas.
No hubo actos emotivos, reconocimientos públicos, agradecimientos sentidos... solo silencio, un silencio pesado y culpable, una injusta omertá.
En contraste, cuando un asesino sale de la cárcel tras cumplir el diez por ciento de la pena que le impuso el tribunal, al llegar a su pueblo se le recibe en loor de multitudes.
Entre él y los suyos mataron a mas de ochocientos españoles en un genocidio que se cometió, casi íntegramente, cuando en España había democracia.
Genocidas escudados en un odio enfermizo incubado por una sociedad miserable... de izquierdas, por supuesto, marxistas para mas señas.
No hubo en sus acciones nada heroico... eran ratas cobardes que disparaban a la nuca de hombres desarmados o ponían bombas lapa bajo los coches.
Decían estar en una guerra, pero no eran soldados, eran asesinos, simples, miserables y cobardes asesinos que sólo apretaban el gatillo cuando se sabían a salvo.
Cuando los detenía la Guardia Civil se hacían sus necesidades encima... y cantaban la traviatta a capella. No se crean que hacía falta torturarlos.
Estos valientes gudaris reciben hoy el reconocimiento de una parte nauseabundamente grande de nuestra sociedad.
Se blanquean sus crímenes, se falsea la historia, se cambia el relato... y se les recibe como héroes en las pocilgas vascas sin que este exótico Ministro del Interior haga nada al respecto.
Se mira otro lado, se hacen los locos, se amparan bajo esa Libertad de Expresión que todo lo justifica, hablan de democracia, pero piensan en votos, escaños y alianzas de poder.
España les importa un carajo.
Me gustaría vivir en una sociedad que tuviese un poquito mas claro quienes son sus héroes y quienes sus asesinos... y por pedir, que sus políticos fuesen gente decente dispuesta a defender a España.
El daño, en esa parte necrosada de nuestra sociedad, es irreparable... pero deberíamos impedir que la cangrena nos coma.
No podemos evitar que un porcentaje de la sociedad sea basura, pero darle la llave de la gobernabilidad me parece excesivo...
Estamos dando el poder a quien quiere destruirnos.
Somos idiotas... idiotas con Pedro Sánchez a la cabeza.
Habían dado su vida por España (aunque fuese en desiertos lejanos) y se les trajo de tapadillo, sin que nadie se enterase, casi con vergüenza...
La palpable realidad del ataúd quitaba credibilidad al relato de "misión de paz", de reparto de vendas y caramelos, que llevaba al gobierno de Zapatero a duplicar los efectivos que España destinó a una guerra en la que los soldados españoles se hartaron a pegar tiros para defenderse.
Porque los hombres que mandó el hipócrita de las cejas picudas a Afghanistan duplicaban en numero a los que sacó de Irak... pueden comprobarlo.
Fueron a una "misión de paz" si, pero en una zona de guerra, que es donde se hacen estas misiones.
A día de hoy, o eres militar, o no sabes nada de lo que pasó en Irak, Bosnia, Kosovo o Afghanistan.
En la sociedad del "no a la guerra", cuando te derriban un helicóptero con un cohete matando a una docena de españoles, el melifluo Ministro de Defensa de turno acude al Congreso a decir que el capitán que lo pilotaba era un torpe o que se confabularon los hados meteorológicos para provocar el "accidente".
Todo menos reconocer que fueron a una guerra a hacer las cosas que hacen los ejércitos.
Todo menos reconocer que dieron su vida por España cumpliendo un juramento, llevando su sentido del deber hasta donde muy pocos son capaces de hacerlo.
Y sí, era una misión de paz... de pacificación, de imposición de la paz en zonas donde aún sangraban las cicatrices de una guerra.
Zonas donde la paz solo puede imponerse a tiros.
Volvieron de tapadillo, sin mas honores que los que les brindaron sus compañeros de armas.
No hubo actos emotivos, reconocimientos públicos, agradecimientos sentidos... solo silencio, un silencio pesado y culpable, una injusta omertá.
En contraste, cuando un asesino sale de la cárcel tras cumplir el diez por ciento de la pena que le impuso el tribunal, al llegar a su pueblo se le recibe en loor de multitudes.
Entre él y los suyos mataron a mas de ochocientos españoles en un genocidio que se cometió, casi íntegramente, cuando en España había democracia.
Genocidas escudados en un odio enfermizo incubado por una sociedad miserable... de izquierdas, por supuesto, marxistas para mas señas.
No hubo en sus acciones nada heroico... eran ratas cobardes que disparaban a la nuca de hombres desarmados o ponían bombas lapa bajo los coches.
Decían estar en una guerra, pero no eran soldados, eran asesinos, simples, miserables y cobardes asesinos que sólo apretaban el gatillo cuando se sabían a salvo.
Cuando los detenía la Guardia Civil se hacían sus necesidades encima... y cantaban la traviatta a capella. No se crean que hacía falta torturarlos.
Estos valientes gudaris reciben hoy el reconocimiento de una parte nauseabundamente grande de nuestra sociedad.
Se blanquean sus crímenes, se falsea la historia, se cambia el relato... y se les recibe como héroes en las pocilgas vascas sin que este exótico Ministro del Interior haga nada al respecto.
Se mira otro lado, se hacen los locos, se amparan bajo esa Libertad de Expresión que todo lo justifica, hablan de democracia, pero piensan en votos, escaños y alianzas de poder.
España les importa un carajo.
Me gustaría vivir en una sociedad que tuviese un poquito mas claro quienes son sus héroes y quienes sus asesinos... y por pedir, que sus políticos fuesen gente decente dispuesta a defender a España.
El daño, en esa parte necrosada de nuestra sociedad, es irreparable... pero deberíamos impedir que la cangrena nos coma.
No podemos evitar que un porcentaje de la sociedad sea basura, pero darle la llave de la gobernabilidad me parece excesivo...
Estamos dando el poder a quien quiere destruirnos.
Somos idiotas... idiotas con Pedro Sánchez a la cabeza.
viernes, 26 de julio de 2019
No es no
Ayer, el aspirante a seguir volando en el Falcon, en sede parlamentaria, nos contó lo dolidísimo que estaba porque Unidas Podemos no le aceptaba las ofertas.
Estuvo llorando casi diez minutos sin recordar que a los parlamentos se viene llorado de casa... un desliz que entendería en un político novato pero no en un "profesional" de la política que se ha dedicado a esto desde que echó los dientes.
Porque Pedro Sánchez y casi todos los que le apoyan y acompañan en esta andadura, ignoran lo que es una declaración trimestral de IVA o superar una entrevista de trabajo (de oposiciones ya ni hablemos).
De hecho, la portavoz del PSOE no terminó el Bachillerato y al portavoz de Esquerra Republicana de Cataluña solo se le conoce un empleo de dependiente en una tienda de modas (algo bastante llamativo dada su habitual indumentaria).
Lo que sí saben estos farsantes es repartirse los ministerios y las vicepresidencias... y trincar del erario a base de bien como si en vez de haberles caído encima una enorme responsabilidad, les hubiese tocado la lotería.
Pedrito y Pablito se han tirado los trastos a la cabeza porque no se ponían de acuerdo en el número e importancia de los sillones a repartir, ya que, como ha dicho el propio Pedro, programáticamente, el PSOE y Podemos presentan muchas similitudes.
De modo que, una vez más, se pone de manifiesto a que se dedican estos mangantes y lo que entienden por gobernar.
Porque para estos señores (y perdónenme por llamarles así) el problema no es vender España, sus instituciones, su honorabilidad o la tumba de su abuela, el problema es la relación entre diputados y trozo de pastel.
Para justificar la rabieta Pedrito llegó a decir que tenía principios y que no los iba a traicionar... dos mentiras en una misma frase.
El bochornoso espectáculo de pelea de patio o tertulia de "sálvame de luxe" entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, jaleados por sus respectivos y entusiastas palmeros, se completó con un intento de pacto in extremis en el que Pablo, quitada ya la careta, le pedía a Pedro "solamente", gestionar los seis mil millones destinados a las políticas activas de empleo... un precio "razonable" a la altura de los gañotes podemitas.
Pero no todo ha sido malo.
Me ha encantado escuchar al portavoz de ERC (ese cuyo apellido le describe con exactitud), haciendo de Celestina. Lamentaba el niño de las impresoras que Pedro y Pablo hubiesen perdido la estupenda oportunidad de formar una coalición progresista para resolver los problemas de España... porque - según parece - a los squadristi del lazo amarillo, los problemas de España les quitan el sueño.
En su afán por reconciliar posturas, les ha regalado un libro de cuentos que ha escrito un golpista de mirada aviesa desde Soto del Real, que estoy deseando leer para constatar que estos sinvergüenzas además de decir sandeces, también las escriben... porque vivir del cuento - seamos sinceros - no te faculta para escribirlos.
En cualquier caso, el empeño de todos los dinamiteros esquizofrénicos por investir a Sánchez, debería hacer reflexionar al PSOE, pues como ya dije el otro día, es indiscutible que Pedro Sánchez es el candidato favorito de los que quieren destruir España (habida cuenta los aspavientos que hacen por ponerle al frente del cotarro)... y me da en la nariz que el rabiadero secesionista y supremacista, no tiene intención de facilitar la "gobernabilidad de España", sino mas bien quieren tener un presidente marioneta, en un gobierno débil al que poder chantajear a su antojo. Extorsión y victimismo a partes iguales.
Los herederos del tres por ciento (que han tenido que irse al Grupo Mixto) han salido a soltarnos el cansino tostón y a reafirmarse en su voluntad de ir a Soto del Real o a Waterloo diciendo - por boca de la pánfila de turno - la retahíla de simplezas absurdas sobre las que han construido su mundo imaginario para robar a los catalanes sin que les molesten desde "Madrit".
Lo de ayer fue un espectáculo a la altura de nuestros insignes políticos... con especial mención al hecho de que el numero de votos que han mandado a Pedrito al rincón de reflexionar ha sido 155 (toda una señal, espero).
Y ahora, como han trabajado mucho y muy bien, se van los señores diputados de vacaciones... y en septiembre veremos que pasa.
Dice mi amigo Alex (cuyo juicio valoro enormemente) que todavía esta por ver que, a la vuelta del verano, no se produzca una coalición Ciudadanos-PSOE... personalmente la veo lejana, pero mi capacidad de sorpresa - debo admitirlo - está muy mermada últimamente.
Me veo votando de nuevo.
¡Que hartura!
Estuvo llorando casi diez minutos sin recordar que a los parlamentos se viene llorado de casa... un desliz que entendería en un político novato pero no en un "profesional" de la política que se ha dedicado a esto desde que echó los dientes.
Porque Pedro Sánchez y casi todos los que le apoyan y acompañan en esta andadura, ignoran lo que es una declaración trimestral de IVA o superar una entrevista de trabajo (de oposiciones ya ni hablemos).
De hecho, la portavoz del PSOE no terminó el Bachillerato y al portavoz de Esquerra Republicana de Cataluña solo se le conoce un empleo de dependiente en una tienda de modas (algo bastante llamativo dada su habitual indumentaria).
Lo que sí saben estos farsantes es repartirse los ministerios y las vicepresidencias... y trincar del erario a base de bien como si en vez de haberles caído encima una enorme responsabilidad, les hubiese tocado la lotería.
Pedrito y Pablito se han tirado los trastos a la cabeza porque no se ponían de acuerdo en el número e importancia de los sillones a repartir, ya que, como ha dicho el propio Pedro, programáticamente, el PSOE y Podemos presentan muchas similitudes.
De modo que, una vez más, se pone de manifiesto a que se dedican estos mangantes y lo que entienden por gobernar.
Porque para estos señores (y perdónenme por llamarles así) el problema no es vender España, sus instituciones, su honorabilidad o la tumba de su abuela, el problema es la relación entre diputados y trozo de pastel.
Para justificar la rabieta Pedrito llegó a decir que tenía principios y que no los iba a traicionar... dos mentiras en una misma frase.
El bochornoso espectáculo de pelea de patio o tertulia de "sálvame de luxe" entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, jaleados por sus respectivos y entusiastas palmeros, se completó con un intento de pacto in extremis en el que Pablo, quitada ya la careta, le pedía a Pedro "solamente", gestionar los seis mil millones destinados a las políticas activas de empleo... un precio "razonable" a la altura de los gañotes podemitas.
Pero no todo ha sido malo.
Me ha encantado escuchar al portavoz de ERC (ese cuyo apellido le describe con exactitud), haciendo de Celestina. Lamentaba el niño de las impresoras que Pedro y Pablo hubiesen perdido la estupenda oportunidad de formar una coalición progresista para resolver los problemas de España... porque - según parece - a los squadristi del lazo amarillo, los problemas de España les quitan el sueño.
En su afán por reconciliar posturas, les ha regalado un libro de cuentos que ha escrito un golpista de mirada aviesa desde Soto del Real, que estoy deseando leer para constatar que estos sinvergüenzas además de decir sandeces, también las escriben... porque vivir del cuento - seamos sinceros - no te faculta para escribirlos.
En cualquier caso, el empeño de todos los dinamiteros esquizofrénicos por investir a Sánchez, debería hacer reflexionar al PSOE, pues como ya dije el otro día, es indiscutible que Pedro Sánchez es el candidato favorito de los que quieren destruir España (habida cuenta los aspavientos que hacen por ponerle al frente del cotarro)... y me da en la nariz que el rabiadero secesionista y supremacista, no tiene intención de facilitar la "gobernabilidad de España", sino mas bien quieren tener un presidente marioneta, en un gobierno débil al que poder chantajear a su antojo. Extorsión y victimismo a partes iguales.
Los herederos del tres por ciento (que han tenido que irse al Grupo Mixto) han salido a soltarnos el cansino tostón y a reafirmarse en su voluntad de ir a Soto del Real o a Waterloo diciendo - por boca de la pánfila de turno - la retahíla de simplezas absurdas sobre las que han construido su mundo imaginario para robar a los catalanes sin que les molesten desde "Madrit".
Lo de ayer fue un espectáculo a la altura de nuestros insignes políticos... con especial mención al hecho de que el numero de votos que han mandado a Pedrito al rincón de reflexionar ha sido 155 (toda una señal, espero).
Y ahora, como han trabajado mucho y muy bien, se van los señores diputados de vacaciones... y en septiembre veremos que pasa.
Dice mi amigo Alex (cuyo juicio valoro enormemente) que todavía esta por ver que, a la vuelta del verano, no se produzca una coalición Ciudadanos-PSOE... personalmente la veo lejana, pero mi capacidad de sorpresa - debo admitirlo - está muy mermada últimamente.
Me veo votando de nuevo.
¡Que hartura!
jueves, 25 de julio de 2019
Sensatez
Mi juventud discurrió entre la época del "destape" y la "movida madrileña".
Hasta "el destape", para ver a una señora como su madre la trajo al mundo en un cine, era necesario viajar a Francia, porque en España las películas se censuraban.
El destape consistía en que cuando uno iba al cine podía ver una o dos señoras en pelota picada, independientemente de que el argumento del film tratase sobre un prostíbulo o sobre la caza de elefantes en Tanzania.
El cine español alcanzó "la madurez" obligando a sus actrices a desnudarse ante la cámara, lo que produjo que actuar bien o no, pasase a un inevitable segundo plano.
Nuestras actrices pasaron a ser de señoras de la talla de Amparo Rivelles o Julia Gutierrez Caba a "proezas interpretativas" como Susana Estrada o Bárbara Rey.
La moda de enseñar el trasero por la pantalla pasó bastante deprisa, pero dejó como secuela que nuestros directores de cine sean incapaces de narrar una historia sin incluir en ella una escena explícita (y frecuentemente innecesaria) de cama.
Del desnudo por "exigencias del guión" hemos pasado al desnudo venga o no a cuento, lo cual - en mi opinión - es un paso atrás para los amantes del séptimo arte.
Y no se crean ustedes que soy de los que se escandalizan por ver una escena de cama, es que cuando no viene a cuento o es excesivamente explicita, se me antoja un recurso de mal gusto para atraer público.
En el cine español, además, es obligatorio alentar el guerracivilismo... porque si no sale un cura malo, un militar psicópata (del ejército nacional) y tres o cuatro milicianos beatificables, no cobras, haciendo con ello un flaco favor al ruinoso cine español y a nuestros bolsillos, porque al final la máquina de bodrios se alimenta de nuestros impuestos en vez de vivir de la taquilla, como sucede en la mayoría de los países civilizados.
De la "movida madrileña" salieron algunos grupos musicales buenos y un montón de morralla.
Los componentes de aquellos grupos musicales que sobrevivieron a la cirrosis, la sobredosis o el sida, han malvivido de la música (con honrosas excepciones) porque - a diferencia del cine - la música no está subvencionada por la izquierda.
Cabe pensar que si la música la hubiesen subvencionado igual que el cine, a estas alturas los cantautores que nos machacaban con esas canciones "con mensaje" que eran - básicamente - un petardo indigestible, ahora serían legión.
En el mundo editorial ha pasado algo parecido.
Un conocido mío, aficionado a escribir y que - dicho sea de paso - no lo hacía nada mal, vio como rechazaban su primer libro de cuentos para niños porque los cuentos "tenían moraleja".
De modo que el vehículo tradicional para educar a los niños que durante los últimos veinte siglos ha sido el cuento o la fábula, por razón de "progreso" debe verse ausente de "moraleja" (que es el mensaje que transmite el cuento) para que te lo publiquen.
Mi generación se arrojó en brazos de "la originalidad" aunque eso supusiese renunciar al buen gusto o una transgresión gratuita de los cánones morales por los que deben regirse las sociedades que no aspiran a su autodestrucción.
Se dedicaron a "romper" con el pasado porque - seamos sinceros - para romper vale cualquiera... lo difícil es construir algo que valga la pena.
Y probablemente por ello, por no "conservar" la parte sensata de nuestro pasado, de nuestra cultura, de nuestra herencia, nos vemos ante una sociedad llena de paradojas e incongruencias.
En este camino hacia la nada hemos dejado atrás el sentido común.
La destrucción de la familia como célula madre de esta sociedad, la creencia de que podemos hacer cualquier cosa sin afrontar sus consecuencias, la soberbia de creerse por encima de la naturaleza y de la realidad, nos conduce al abismo... y como decía mi admirado Chesterton "Cuando lo que tienes delante es un precipicio, el único paso adelante que puedes dar es uno hacia atrás."
Recuperar la sensatez y perder la vergüenza a combatir a cínicos, hipócritas y cuentistas con gañote, es lo único que vamos a poder hacer en este mundo de locos.
Eduquen en ello a sus hijos y a sus nietos, es una inversión a largo plazo... y quien sabe si, al final, la salvación de España.
Hasta "el destape", para ver a una señora como su madre la trajo al mundo en un cine, era necesario viajar a Francia, porque en España las películas se censuraban.
El destape consistía en que cuando uno iba al cine podía ver una o dos señoras en pelota picada, independientemente de que el argumento del film tratase sobre un prostíbulo o sobre la caza de elefantes en Tanzania.
El cine español alcanzó "la madurez" obligando a sus actrices a desnudarse ante la cámara, lo que produjo que actuar bien o no, pasase a un inevitable segundo plano.
Nuestras actrices pasaron a ser de señoras de la talla de Amparo Rivelles o Julia Gutierrez Caba a "proezas interpretativas" como Susana Estrada o Bárbara Rey.
La moda de enseñar el trasero por la pantalla pasó bastante deprisa, pero dejó como secuela que nuestros directores de cine sean incapaces de narrar una historia sin incluir en ella una escena explícita (y frecuentemente innecesaria) de cama.
Del desnudo por "exigencias del guión" hemos pasado al desnudo venga o no a cuento, lo cual - en mi opinión - es un paso atrás para los amantes del séptimo arte.
Y no se crean ustedes que soy de los que se escandalizan por ver una escena de cama, es que cuando no viene a cuento o es excesivamente explicita, se me antoja un recurso de mal gusto para atraer público.
En el cine español, además, es obligatorio alentar el guerracivilismo... porque si no sale un cura malo, un militar psicópata (del ejército nacional) y tres o cuatro milicianos beatificables, no cobras, haciendo con ello un flaco favor al ruinoso cine español y a nuestros bolsillos, porque al final la máquina de bodrios se alimenta de nuestros impuestos en vez de vivir de la taquilla, como sucede en la mayoría de los países civilizados.
De la "movida madrileña" salieron algunos grupos musicales buenos y un montón de morralla.
Los componentes de aquellos grupos musicales que sobrevivieron a la cirrosis, la sobredosis o el sida, han malvivido de la música (con honrosas excepciones) porque - a diferencia del cine - la música no está subvencionada por la izquierda.
Cabe pensar que si la música la hubiesen subvencionado igual que el cine, a estas alturas los cantautores que nos machacaban con esas canciones "con mensaje" que eran - básicamente - un petardo indigestible, ahora serían legión.
En el mundo editorial ha pasado algo parecido.
Un conocido mío, aficionado a escribir y que - dicho sea de paso - no lo hacía nada mal, vio como rechazaban su primer libro de cuentos para niños porque los cuentos "tenían moraleja".
De modo que el vehículo tradicional para educar a los niños que durante los últimos veinte siglos ha sido el cuento o la fábula, por razón de "progreso" debe verse ausente de "moraleja" (que es el mensaje que transmite el cuento) para que te lo publiquen.
Mi generación se arrojó en brazos de "la originalidad" aunque eso supusiese renunciar al buen gusto o una transgresión gratuita de los cánones morales por los que deben regirse las sociedades que no aspiran a su autodestrucción.
Se dedicaron a "romper" con el pasado porque - seamos sinceros - para romper vale cualquiera... lo difícil es construir algo que valga la pena.
Y probablemente por ello, por no "conservar" la parte sensata de nuestro pasado, de nuestra cultura, de nuestra herencia, nos vemos ante una sociedad llena de paradojas e incongruencias.
En este camino hacia la nada hemos dejado atrás el sentido común.
La destrucción de la familia como célula madre de esta sociedad, la creencia de que podemos hacer cualquier cosa sin afrontar sus consecuencias, la soberbia de creerse por encima de la naturaleza y de la realidad, nos conduce al abismo... y como decía mi admirado Chesterton "Cuando lo que tienes delante es un precipicio, el único paso adelante que puedes dar es uno hacia atrás."
Recuperar la sensatez y perder la vergüenza a combatir a cínicos, hipócritas y cuentistas con gañote, es lo único que vamos a poder hacer en este mundo de locos.
Eduquen en ello a sus hijos y a sus nietos, es una inversión a largo plazo... y quien sabe si, al final, la salvación de España.
martes, 23 de julio de 2019
Cherchez la femme
No hace falta consultar al Oráculo de Delfos para saber con que apoyos va a ser presidente del gobierno el guapito de cara.
El ejercicio de predicción es - en este caso - muy sencillo, porque ya sabemos de antemano que va a hacer el marido de Begoña para sentarse en el falcon los próximos cuatro años.
Lo que va a hacer Pedro Sánchez para permanecer en la Moncloa es - literalmente - cualquier cosa.
Como posee algunos rudimentos de economía (no tantos como para escribir su propia tesis doctoral) va a recurrir a la única ley por la que se rigen los que carecen de cualquier atisbo de moral: la de la oferta y la demanda.
En el caso de Pedrito la mercancía a ofertar es España.
En su totalidad.
Instituciones, territorios, Constitución... todo está en venta para este ambicioso saco de nada.
Como buen estafador, la única habilidad que ha desarrollado es la de predecir que es lo que desean los que pueden apoyar sus ambiciones... y ofrecerselo en pago.
Ofrecer, lo que se dice ofrecer, ofrecerá lo que puede y lo que no puede, porque como el buhonero, lo de cumplir las promesas es harina de otro costal.
Y en cuanto a las minorías abyectas, "cherchez la femme".
¿Creen ustedes que para los bilduetarras, separatistas catalanes, republicanos de gañote ancho, vividores del erario y chantajistas en general, existe mejor candidato que el presidente volador?
Al final, los que quieren destruir España apoyarán a quien mejor se adapte a sus deseos... y no creo que se decanten por Santiago Abascal.
Así que no vamos a caer en la tentación de creernos el sainete que están montando para hacer ver que están negociando un gobierno "de progreso" y que eso exige duras negociaciones... desgraciadamente, hace ya años, sabemos con que bueyes estamos arando.
La única incógnita por despejar en esta ecuación de predicción de futuro, es la de las estadísticas.
Si el guapete de la piscina llega a creer que unos nuevos comicios le darían mayor peso en el congreso, las elecciones están servidas.
Porque el dinero está para eso... como no es de "nadie".
Mientras tanto vayan sacando el chubasquero.
A estos lo de gobernar para los españoles les trae al pairo.
El ejercicio de predicción es - en este caso - muy sencillo, porque ya sabemos de antemano que va a hacer el marido de Begoña para sentarse en el falcon los próximos cuatro años.
Lo que va a hacer Pedro Sánchez para permanecer en la Moncloa es - literalmente - cualquier cosa.
Como posee algunos rudimentos de economía (no tantos como para escribir su propia tesis doctoral) va a recurrir a la única ley por la que se rigen los que carecen de cualquier atisbo de moral: la de la oferta y la demanda.
En el caso de Pedrito la mercancía a ofertar es España.
En su totalidad.
Instituciones, territorios, Constitución... todo está en venta para este ambicioso saco de nada.
Como buen estafador, la única habilidad que ha desarrollado es la de predecir que es lo que desean los que pueden apoyar sus ambiciones... y ofrecerselo en pago.
Ofrecer, lo que se dice ofrecer, ofrecerá lo que puede y lo que no puede, porque como el buhonero, lo de cumplir las promesas es harina de otro costal.
Y en cuanto a las minorías abyectas, "cherchez la femme".
¿Creen ustedes que para los bilduetarras, separatistas catalanes, republicanos de gañote ancho, vividores del erario y chantajistas en general, existe mejor candidato que el presidente volador?
Al final, los que quieren destruir España apoyarán a quien mejor se adapte a sus deseos... y no creo que se decanten por Santiago Abascal.
Así que no vamos a caer en la tentación de creernos el sainete que están montando para hacer ver que están negociando un gobierno "de progreso" y que eso exige duras negociaciones... desgraciadamente, hace ya años, sabemos con que bueyes estamos arando.
La única incógnita por despejar en esta ecuación de predicción de futuro, es la de las estadísticas.
Si el guapete de la piscina llega a creer que unos nuevos comicios le darían mayor peso en el congreso, las elecciones están servidas.
Porque el dinero está para eso... como no es de "nadie".
Mientras tanto vayan sacando el chubasquero.
A estos lo de gobernar para los españoles les trae al pairo.
lunes, 22 de julio de 2019
Sermones
Si ha ido usted a misa el numero suficiente de ocasiones, habrá constatado que no es extraño encontrarse con sacerdotes que en cuanto se suben al púlpito pierden la noción del tiempo.
De algunos podría incluso decirse que en esos minutos que la liturgia pone a su disposición, están mas pendientes de escucharse a si mismos que de recibir el feed-back de sus sufridos feligreses, cuyas bocas terminan - inevitablemente - abriéndose como la del león de la Metro, en contagiosos bostezos que de ninguna manera engalanan la ceremonia dominical.
Si el oficiante - además - no se ha preparado convenientemente el sermón, saldrá a tocar de oído y lo mas probable es que reciba usted un manojo de divagaciones que ríase de las que lee en este blog.
Como feligrés está usted obligado a soportar pacientemente los tostones que le correspondan y, si posee usted la suficiente gracia santificante, lo hará, además, de buen grado... consciente de que el camino a la santidad está cuajadito de tostones.
Para ser justo, debo aclarar aquí que tragarse un ladrillo no es lo habitual, y que contrariamente a lo que sucede en política, los sermones de nuestros sacerdotes suelen estar dotados de contenido.
Hoy, durante la sesión de investidura del pollo del avión, he tenido la sensación de que estaba presenciando un congreso nacional de curas tostoneros.
Entre arcada y arcada he contemplado atónito como en España, para ser parlamentario, basta con saber enlazar una estupidez con otra y enumerar las consignas de obligada difusión.
Imagino que en los cursos de parlamentarismo español se reparten diccionarios de sinónimos y se obliga a hablar a los alumnos como Cantinflas... supongo que si el educando es capaz - además - de adornar el tostón con cursiladas de alta densidad y alusiones (peyorativas) a Franco, seguramente obtendrá una nota excelente.
Las intervenciones de la ultra-izquierda (esa con la que quiere formar gobierno el marido de Begoña) ponen de manifiesto que la teoría de los universos paralelos tiene fundamento, pues a tenor de lo expresado por los plastas con micrófono se dirime que todos ellos viven en un universo ajeno a la realidad de España.
Por cierto, que - según parece - en ese universo paralelo Pablo Iglesias, por haber perdido 29 escaños en las ultimas elecciones, tiene derecho a varias carteras ministeriales.
También he podido constatar que Pedro Sánchez (ese que pacta con Torra y blanquea a Otegui), es un patriota... y que - según parece - los demás tienen que permitir que siga viajando en Falcon por el bien de España.
Con mas o menos acierto los grandes grupos se han dedicado al "anda que tú" y los pequeños a sacar la cajita de sandeces del progreso. La mujer, el machismo, los homosexuales, la solidaridad, Cataluña como problema de Estado, las leyes progresistas... la insoportable y vacía cantinela habitual.
Santiago Abascal ha salido a cantarle las verdades del barquero a la concurrencia... y como era de esperar, lo ha hecho sin pelos en la lengua.
Pedro Sánchez será presidente del gobierno.
Hasta ahora, lo que hemos estado contemplando era teatro, los remilgos fingidos, los recelos falsos...
Formará el peor gobierno posible y tendremos que aguantar que nos sermoneen con sus memeces los que son inasequibles al pensamiento, los filoterroristas y los que quieren volver a los reinos de taifas.
El rodillo mediático nos intentará convencer de que Pedro Sanchez es Felipe II, y que dispararse en un pie es progresista...
Armense de paciencia.
Espero que, al menos, de cuando en cuando, Casado o Abascal nos den una alegría parlamentaria.
Va a ser todo lo bueno que saquemos de este naufragio.
De algunos podría incluso decirse que en esos minutos que la liturgia pone a su disposición, están mas pendientes de escucharse a si mismos que de recibir el feed-back de sus sufridos feligreses, cuyas bocas terminan - inevitablemente - abriéndose como la del león de la Metro, en contagiosos bostezos que de ninguna manera engalanan la ceremonia dominical.
Si el oficiante - además - no se ha preparado convenientemente el sermón, saldrá a tocar de oído y lo mas probable es que reciba usted un manojo de divagaciones que ríase de las que lee en este blog.
Como feligrés está usted obligado a soportar pacientemente los tostones que le correspondan y, si posee usted la suficiente gracia santificante, lo hará, además, de buen grado... consciente de que el camino a la santidad está cuajadito de tostones.
Para ser justo, debo aclarar aquí que tragarse un ladrillo no es lo habitual, y que contrariamente a lo que sucede en política, los sermones de nuestros sacerdotes suelen estar dotados de contenido.
Hoy, durante la sesión de investidura del pollo del avión, he tenido la sensación de que estaba presenciando un congreso nacional de curas tostoneros.
Entre arcada y arcada he contemplado atónito como en España, para ser parlamentario, basta con saber enlazar una estupidez con otra y enumerar las consignas de obligada difusión.
Imagino que en los cursos de parlamentarismo español se reparten diccionarios de sinónimos y se obliga a hablar a los alumnos como Cantinflas... supongo que si el educando es capaz - además - de adornar el tostón con cursiladas de alta densidad y alusiones (peyorativas) a Franco, seguramente obtendrá una nota excelente.
Las intervenciones de la ultra-izquierda (esa con la que quiere formar gobierno el marido de Begoña) ponen de manifiesto que la teoría de los universos paralelos tiene fundamento, pues a tenor de lo expresado por los plastas con micrófono se dirime que todos ellos viven en un universo ajeno a la realidad de España.
Por cierto, que - según parece - en ese universo paralelo Pablo Iglesias, por haber perdido 29 escaños en las ultimas elecciones, tiene derecho a varias carteras ministeriales.
También he podido constatar que Pedro Sánchez (ese que pacta con Torra y blanquea a Otegui), es un patriota... y que - según parece - los demás tienen que permitir que siga viajando en Falcon por el bien de España.
Con mas o menos acierto los grandes grupos se han dedicado al "anda que tú" y los pequeños a sacar la cajita de sandeces del progreso. La mujer, el machismo, los homosexuales, la solidaridad, Cataluña como problema de Estado, las leyes progresistas... la insoportable y vacía cantinela habitual.
Santiago Abascal ha salido a cantarle las verdades del barquero a la concurrencia... y como era de esperar, lo ha hecho sin pelos en la lengua.
Pedro Sánchez será presidente del gobierno.
Hasta ahora, lo que hemos estado contemplando era teatro, los remilgos fingidos, los recelos falsos...
Formará el peor gobierno posible y tendremos que aguantar que nos sermoneen con sus memeces los que son inasequibles al pensamiento, los filoterroristas y los que quieren volver a los reinos de taifas.
El rodillo mediático nos intentará convencer de que Pedro Sanchez es Felipe II, y que dispararse en un pie es progresista...
Armense de paciencia.
Espero que, al menos, de cuando en cuando, Casado o Abascal nos den una alegría parlamentaria.
Va a ser todo lo bueno que saquemos de este naufragio.
viernes, 12 de julio de 2019
Stonewall
El general Barnard Elliot Bee murió en 1861 en la primera batalla de Bull Run, durante la guerra de secesión americana, a él debemos el sobrenombre que acompañó a uno de los mejores generales de la confederación, que no fue otro que el modélico Thomas Jonathan Jackson, un virginiano que demostró que con fuerzas muy inferiores se podían dar palizas épicas a sus adversarios.
Huérfano de ambos padres desde los siete años, criado por parientes, ingresó en West Point con 18 años, tras graduarse sirvió en la guerra con Mejico como oficial de artillería, y al finalizar ésta (con el grado de Mayor), regresó a su Virginia natal donde permaneció hasta que estalló la guerra de secesión.
Sirvió a las ordenes de Robert Edward Lee al frente de la milicia de Virginia y enseguida destacó como el magnifico militar que era.
Su sobrenombre, "stonewall" (muro de piedra) se debe a una arenga del general Bee que gritó a sus hombres: "¡Ahí esta Jackson como una muralla de piedra!, ¡Agrúpense detrás de los virginianos!".
Tuvo Thomas Jackson muchas ocasiones de demostrar que en efecto era el "stonewall" contra el que se estrellaba una y otra vez el ejército federal y los testimonios de su valor y bonhomía, además de su genio táctico fueron abundantes... ganándose en muy poco tiempo un respeto reverencial - incluso - de sus enemigos.
A su muerte el general Lee exclamó que Jackson había perdido el brazo izquierdo (la herida que le llevó a la tumba), pero él había perdido - con su fallecimiento - el brazo derecho.
En tiempos difíciles aparecen hombres grandes.
Y son esos mismos tiempos los que forjan a las generaciones que recomponen las sociedades.
La Historia está plagada de ejemplos de ello.
Mas tarde o mas temprano esas generaciones son sustituidas por otras que, al no tener que afrontar tiempos difíciles, se van debilitando hasta que se genera - nuevamente - una situación que exige el nacimiento de generaciones duras y capaces de sobreponerse a los problemas derivados de la dejadez de sus antecesores.
No se si seremos nosotros, nuestros hijos o nuestros nietos los que tendrán que poner pié en pared para regenerar esta sociedad blanda y complaciente, sin valores y sumida en la extravagancia... pero tengo claro que - antes de su destrucción - habrá una generación que lo evite.
Mientras tanto, nuestra obligación será mantener viva la llama de la razón, del honor, de la lealtad a la Patria, de los valores que hacen grandes a los hombres... con la esperanza de que tarde o temprano, recojan nuestro testigo.
Es hora de agruparse detrás de los virginianos.
Aunque no se vea claramente donde está "stonewall" Jackson.
Huérfano de ambos padres desde los siete años, criado por parientes, ingresó en West Point con 18 años, tras graduarse sirvió en la guerra con Mejico como oficial de artillería, y al finalizar ésta (con el grado de Mayor), regresó a su Virginia natal donde permaneció hasta que estalló la guerra de secesión.
Sirvió a las ordenes de Robert Edward Lee al frente de la milicia de Virginia y enseguida destacó como el magnifico militar que era.
Su sobrenombre, "stonewall" (muro de piedra) se debe a una arenga del general Bee que gritó a sus hombres: "¡Ahí esta Jackson como una muralla de piedra!, ¡Agrúpense detrás de los virginianos!".
Tuvo Thomas Jackson muchas ocasiones de demostrar que en efecto era el "stonewall" contra el que se estrellaba una y otra vez el ejército federal y los testimonios de su valor y bonhomía, además de su genio táctico fueron abundantes... ganándose en muy poco tiempo un respeto reverencial - incluso - de sus enemigos.
A su muerte el general Lee exclamó que Jackson había perdido el brazo izquierdo (la herida que le llevó a la tumba), pero él había perdido - con su fallecimiento - el brazo derecho.
En tiempos difíciles aparecen hombres grandes.
Y son esos mismos tiempos los que forjan a las generaciones que recomponen las sociedades.
La Historia está plagada de ejemplos de ello.
Mas tarde o mas temprano esas generaciones son sustituidas por otras que, al no tener que afrontar tiempos difíciles, se van debilitando hasta que se genera - nuevamente - una situación que exige el nacimiento de generaciones duras y capaces de sobreponerse a los problemas derivados de la dejadez de sus antecesores.
No se si seremos nosotros, nuestros hijos o nuestros nietos los que tendrán que poner pié en pared para regenerar esta sociedad blanda y complaciente, sin valores y sumida en la extravagancia... pero tengo claro que - antes de su destrucción - habrá una generación que lo evite.
Mientras tanto, nuestra obligación será mantener viva la llama de la razón, del honor, de la lealtad a la Patria, de los valores que hacen grandes a los hombres... con la esperanza de que tarde o temprano, recojan nuestro testigo.
Es hora de agruparse detrás de los virginianos.
Aunque no se vea claramente donde está "stonewall" Jackson.
miércoles, 10 de julio de 2019
Fomentadores del odio
Ya en mi temprana juventud aprendí que es rigurosamente cierto lo que dice el refrán "quien con niños se acuesta, mojado se levanta".
Confiar en quien no debes, te conduce en no pocas ocasiones a tomar decisiones erróneas (en el mejor de los casos) o a situaciones de las que después no te queda otra que arrepentirte.
Le pasa a todo el mundo, lo difícil es darse cuenta del error y enmendarlo.
Creo que fue a finales de los ochenta del siglo pasado cuando mi padre me pasó una breve reseña, publicada en un periódico de tirada nacional, sobre la muerte de cierto general ruso (de la extinta URSS) en la que describían sus méritos y condecoraciones.
Me llamó la atención el hecho de que había sido condecorado por su trabajo con los grupos ecologistas alemanes y holandeses. Esa distinción se le otorgaba por haber impulsado la lucha contra la energía nuclear en la Alemania libre y en los Países Bajos... poniendo de relieve - con toda naturalidad - que esos grupos ecologistas que tanta lata dieron, estaban apoyados y subvencionados por la URSS.
No fue lo único que subvencionaron, la mayor parte de los grupos terroristas (por no decir todos) que llenaron Europa (y España) de sangre en la segunda mitad del siglo XX, recibían ayuda de una forma u otra de los servicios de inteligencia soviéticos... y eran de corte marxista.
La caída del muro de Berlin expuso el secreto mejor guardado: que los países de la órbita comunista eran un fracaso en todos los sentidos.
Vimos regiones devastadas, contaminadas y empobrecidas... un atraso tecnológico impresionante y la evidencia de que las oligarquías rusas habían sustituido directamente a la corte de los zares, acumulando las riquezas que se negaban a ese pueblo que explotaban bajo un régimen de terror.
Ese secreto expuesto a la luz dejó en evidencia a los que - en occidente - se dedicaron a custodiarlo con entusiasmo... la "intelectualidad" de izquierdas, los promotores del vergonzoso "mayo del 68".
Durante unos años, aquellos que defendían las bondades del marxismo tuvieron que callarse porque la evidencia de la mentira que habían defendido a capa y espada era aplastante.
Pronto, las banderas rojas fueron mudando (y yo lo vi) hacia otras formas de protesta revolucionaria.
El obrero, pieza fundamental de la "lucha de clases", se había acomodado al capitalismo, y la propia "lucha de clases" - en vista de los resultados - empezaba a parecer un concepto poco atractivo.
Había que cambiar de objetivo, tenían que buscar una nueva base social que sustentase el odio... y la encontraron en los inempleables y los desequilibrados.
El ecologismo mudó hacia formas de animalismo irracional, la lucha por un trabajo digno hacia formas de vida marginales, florecieron los movimientos anti-sociales, de "okupación", de defensa de "derechos" sexuales, o peor aún, de defensa de la "ideología" de "género"...
Cualquier desequilibrado (y no estoy usando este término como insulto) que fuera inasequible a la moderación o al esfuerzo intelectual, se apuntaba con entusiasmo a alguna de estas causas.
Los colectivos feminazis, el talibanismo rosa, los movimientos de "transformación de la realidad", responden a la necesidad de crear una masa irracional dotada de un odio indefendible para sostener "la lucha" que, en los países que promueven y financian estas cosas, no se puede desarrollar... porque está perseguida.
Sucede que todos estos movimientos se desarrollan siempre en países donde la defensa jurídica está asegurada y el bienestar social alcanza cotas propias del primer mundo... seguramente porque cuando el problema es comer o encontrar agua, lo demás pasa a segundo plano.
Y este es el contexto en el que hay que entender lo que pasa.
El hombre, aterrado por el vacío espiritual infinito que le fomenta esta basura de sociedad en la que estamos inmersos, busca causas que le dignifiquen, colectivos en los que apoyarse, culpables en quienes proyectar su incapacidad de llenar la oquedad que le asola.
Y los de siempre, los que se alimentan y enriquecen con el odio, los profesionales de la mentira, les acogen con los brazos abiertos.
A los de Ciudadanos le han echado del "día del orgullo" y están muy dolidos... cuando deberían estar contentísimos de que la piara de tarados que los ha expulsado de ese espectáculo incalificable, no los reconozca como iguales.
¿O no aprendieron aquello de "dime con quien andas y te diré quién eres"?
El año que viene harían bien en ahorrarse el disgusto.
Y ya que estamos, impulsar que no se malgaste el dinero público en apoyar a las asociaciones que fomentan el odio o las extravagancias.
No nos sobra la pasta... y seguro que se les ocurre algo mejor en que gastarla.
Confiar en quien no debes, te conduce en no pocas ocasiones a tomar decisiones erróneas (en el mejor de los casos) o a situaciones de las que después no te queda otra que arrepentirte.
Le pasa a todo el mundo, lo difícil es darse cuenta del error y enmendarlo.
Creo que fue a finales de los ochenta del siglo pasado cuando mi padre me pasó una breve reseña, publicada en un periódico de tirada nacional, sobre la muerte de cierto general ruso (de la extinta URSS) en la que describían sus méritos y condecoraciones.
Me llamó la atención el hecho de que había sido condecorado por su trabajo con los grupos ecologistas alemanes y holandeses. Esa distinción se le otorgaba por haber impulsado la lucha contra la energía nuclear en la Alemania libre y en los Países Bajos... poniendo de relieve - con toda naturalidad - que esos grupos ecologistas que tanta lata dieron, estaban apoyados y subvencionados por la URSS.
No fue lo único que subvencionaron, la mayor parte de los grupos terroristas (por no decir todos) que llenaron Europa (y España) de sangre en la segunda mitad del siglo XX, recibían ayuda de una forma u otra de los servicios de inteligencia soviéticos... y eran de corte marxista.
La caída del muro de Berlin expuso el secreto mejor guardado: que los países de la órbita comunista eran un fracaso en todos los sentidos.
Vimos regiones devastadas, contaminadas y empobrecidas... un atraso tecnológico impresionante y la evidencia de que las oligarquías rusas habían sustituido directamente a la corte de los zares, acumulando las riquezas que se negaban a ese pueblo que explotaban bajo un régimen de terror.
Ese secreto expuesto a la luz dejó en evidencia a los que - en occidente - se dedicaron a custodiarlo con entusiasmo... la "intelectualidad" de izquierdas, los promotores del vergonzoso "mayo del 68".
Durante unos años, aquellos que defendían las bondades del marxismo tuvieron que callarse porque la evidencia de la mentira que habían defendido a capa y espada era aplastante.
Pronto, las banderas rojas fueron mudando (y yo lo vi) hacia otras formas de protesta revolucionaria.
El obrero, pieza fundamental de la "lucha de clases", se había acomodado al capitalismo, y la propia "lucha de clases" - en vista de los resultados - empezaba a parecer un concepto poco atractivo.
Había que cambiar de objetivo, tenían que buscar una nueva base social que sustentase el odio... y la encontraron en los inempleables y los desequilibrados.
El ecologismo mudó hacia formas de animalismo irracional, la lucha por un trabajo digno hacia formas de vida marginales, florecieron los movimientos anti-sociales, de "okupación", de defensa de "derechos" sexuales, o peor aún, de defensa de la "ideología" de "género"...
Cualquier desequilibrado (y no estoy usando este término como insulto) que fuera inasequible a la moderación o al esfuerzo intelectual, se apuntaba con entusiasmo a alguna de estas causas.
Los colectivos feminazis, el talibanismo rosa, los movimientos de "transformación de la realidad", responden a la necesidad de crear una masa irracional dotada de un odio indefendible para sostener "la lucha" que, en los países que promueven y financian estas cosas, no se puede desarrollar... porque está perseguida.
Sucede que todos estos movimientos se desarrollan siempre en países donde la defensa jurídica está asegurada y el bienestar social alcanza cotas propias del primer mundo... seguramente porque cuando el problema es comer o encontrar agua, lo demás pasa a segundo plano.
Y este es el contexto en el que hay que entender lo que pasa.
El hombre, aterrado por el vacío espiritual infinito que le fomenta esta basura de sociedad en la que estamos inmersos, busca causas que le dignifiquen, colectivos en los que apoyarse, culpables en quienes proyectar su incapacidad de llenar la oquedad que le asola.
Y los de siempre, los que se alimentan y enriquecen con el odio, los profesionales de la mentira, les acogen con los brazos abiertos.
A los de Ciudadanos le han echado del "día del orgullo" y están muy dolidos... cuando deberían estar contentísimos de que la piara de tarados que los ha expulsado de ese espectáculo incalificable, no los reconozca como iguales.
¿O no aprendieron aquello de "dime con quien andas y te diré quién eres"?
El año que viene harían bien en ahorrarse el disgusto.
Y ya que estamos, impulsar que no se malgaste el dinero público en apoyar a las asociaciones que fomentan el odio o las extravagancias.
No nos sobra la pasta... y seguro que se les ocurre algo mejor en que gastarla.
sábado, 6 de julio de 2019
Extremo-centro
El centro nació en España con vocación de bisagra.
El centro es - como ya he dicho en otras ocasiones - ese lugar confortable donde caben todas las ideas siempre que no le exijan a uno defenderlas.
A veces, cuando sopla levante, el centro se arrima a la izquierda, y si sopla poniente, a la derecha.
En el centro es tan defendible la natalidad como el aborto, la unidad nacional como el federalismo... sólo sucumben a la corrección política y la dictadura rosa.
Por eso, llama poderosamente la atención que los partidos de centro, cuando llega la hora de pactar se comporten como hooligans.
Los del extremo centro naranja han decidido que la nueva política consiste en poner lineas rojas a diestro y siniestro y en intentar que siendo la segunda o tercera fuerza, se les otorgue el mando... siempre en base a su apoyo para facilitar la gobernabilidad.
Y no me parece mal.
El que les ha votado - a lo mejor - eso es lo que quiere... y no seré yo quien critique a un partido por hacer lo que le piden sus votantes.
Al otro representante de la nueva política, el jeta de Galapagar, le pasa lo mismo.
Pierde votos a cascoporro pero exige ministerios, ya que su apoyo, desgraciadamente, no es todo lo decisivo que precisa una vicepresidencia.
Al final la nueva política se resume a gobernar sin apoyo en vez de alcanzar consensos.
Para el extremo centro, Vox tiene que brindarle apoyo sin recibir nada a cambio.
Es mas, debe brindarle apoyo a cambio de desprecios... por patriotismo, que es esa palabra que siempre le ha costado pronunciar al melifluo centro español.
De modo que Vox, en opinión del extremo-centro, debe renunciar a defender aquello por lo que le han votado para dárselo a ellos.
Así, el votante de Vox, que no se sabe muy bien de que cueva ha salido, tiene que renunciar a que sus representantes intenten influenciar en la política para que triunfe la nada ideológica de los que hoy se levantan con un pie y mañana con otro.
Y eso debe ser porque a la nueva política el poder le llega - como al Caudillo - "Por la Gracia de Dios".
Y tengo en estos momentos el corazón partido (como diría Alejandro Sanz) porque siento que no alcanzar un consenso en Murcia o Madrid solo beneficia al del avión... y esa - coincidirán conmigo - no era la idea.
Pero entiendo que renunciar a hacer política no puede ser la exigencia que los ultras de la bisagra le pongan a Vox... porque es (entre otras cosas) antidemocrático.
Y que quieren que les diga, votar a Vox para que mande Ciudadanos, sin pacto alguno, tampoco creo que sea lo que quieren los que votaron a la formación de Abascal.
Si se pierden las dos comunidades, no se equivoquen, se lo deberemos a Rivera que ha convertido la bisagra en un cerrojo.
Vox no pide nada raro y, sobre todo, no pide nada que Ciudadanos no haya pedido anteriormente... cuando no era el extremo-centro español.
El centro es - como ya he dicho en otras ocasiones - ese lugar confortable donde caben todas las ideas siempre que no le exijan a uno defenderlas.
A veces, cuando sopla levante, el centro se arrima a la izquierda, y si sopla poniente, a la derecha.
En el centro es tan defendible la natalidad como el aborto, la unidad nacional como el federalismo... sólo sucumben a la corrección política y la dictadura rosa.
Por eso, llama poderosamente la atención que los partidos de centro, cuando llega la hora de pactar se comporten como hooligans.
Los del extremo centro naranja han decidido que la nueva política consiste en poner lineas rojas a diestro y siniestro y en intentar que siendo la segunda o tercera fuerza, se les otorgue el mando... siempre en base a su apoyo para facilitar la gobernabilidad.
Y no me parece mal.
El que les ha votado - a lo mejor - eso es lo que quiere... y no seré yo quien critique a un partido por hacer lo que le piden sus votantes.
Al otro representante de la nueva política, el jeta de Galapagar, le pasa lo mismo.
Pierde votos a cascoporro pero exige ministerios, ya que su apoyo, desgraciadamente, no es todo lo decisivo que precisa una vicepresidencia.
Al final la nueva política se resume a gobernar sin apoyo en vez de alcanzar consensos.
Para el extremo centro, Vox tiene que brindarle apoyo sin recibir nada a cambio.
Es mas, debe brindarle apoyo a cambio de desprecios... por patriotismo, que es esa palabra que siempre le ha costado pronunciar al melifluo centro español.
De modo que Vox, en opinión del extremo-centro, debe renunciar a defender aquello por lo que le han votado para dárselo a ellos.
Así, el votante de Vox, que no se sabe muy bien de que cueva ha salido, tiene que renunciar a que sus representantes intenten influenciar en la política para que triunfe la nada ideológica de los que hoy se levantan con un pie y mañana con otro.
Y eso debe ser porque a la nueva política el poder le llega - como al Caudillo - "Por la Gracia de Dios".
Y tengo en estos momentos el corazón partido (como diría Alejandro Sanz) porque siento que no alcanzar un consenso en Murcia o Madrid solo beneficia al del avión... y esa - coincidirán conmigo - no era la idea.
Pero entiendo que renunciar a hacer política no puede ser la exigencia que los ultras de la bisagra le pongan a Vox... porque es (entre otras cosas) antidemocrático.
Y que quieren que les diga, votar a Vox para que mande Ciudadanos, sin pacto alguno, tampoco creo que sea lo que quieren los que votaron a la formación de Abascal.
Si se pierden las dos comunidades, no se equivoquen, se lo deberemos a Rivera que ha convertido la bisagra en un cerrojo.
Vox no pide nada raro y, sobre todo, no pide nada que Ciudadanos no haya pedido anteriormente... cuando no era el extremo-centro español.
miércoles, 3 de julio de 2019
Estafadores
Hace un par de meses unos amigos me engañaron para que fuese a un restaurante de provincias a tener una experiencia gastronómica.
El restaurante no estaba mal, era un local limpio, con una decoración un poco minimalista para mi gusto y con el numero adecuado de camareros.
El menú era de degustación.
Admito que llegué al restaurante con cierto resquemor, porque la última vez que me pusieron por delante un menú de degustación fui incapaz de pasar del cuarto plato (y había siete)... pero no se dio ese caso.
En una variedad asombrosa de recipientes de todos los tamaños fueron desfilando ante mis ojos una serie de platos cuyo denominador común era la rídicula cantidad de comida que portaban.
Admito que no estaban malos... unos me gustaron mas que otros (ya saben, para gustos se hicieron los colores), pero tras probar ocho o diez cosas diferentes, regado todo ello por un vino pasable de la comarca en la que se asentaba el local, me levanté con hambre y la sensación de que, habida cuenta el precio de la experiencia, me habían tomado el pelo.
No es lo peor que me ha pasado en restaurantes.
En general, supongo que como usted, estoy dispuesto a pagar un poco mas de lo razonable cuando la comida es buena y abundante, y me molesta en sobremanera pagar (aunque no sea mucho) por ingerir basura aunque me la sirvan a toneladas.
Cuando salimos por la puerta del restaurante uno de mis amigos comentó: "¡Cuanto daño ha hecho Master Chef!"
Y esto me llevó a pensar cuan incautos podemos llegar a ser los mortales y que maleables cuando caemos en las garras de una persona manipuladora.
Recordé haber leido que cuando se proyectó por primera vez en los USA la película "Bamby" creó una enorme conmoción social... de hecho, en uno de los cincuenta y dos estados se prohibió la caza de ciervos. Esta prohibición generó que una decada después hubiese poco menos que exterminarlos, porque los problemas derivados del crecimiento desmesurado de la población de ciervos crearon una situación insostenible.
Supongo que cuando el malagueño Walt Disney empezó a humanizar a los graciosos animalitos que salían en sus películas, no podía prever que transcurridos unos años habría movimientos sociales pidiendo derechos para los animales.
Dotar de características humanas a los animales para contar historias con moraleja ya lo hacía Esopo, pero la factoría Disney dio un paso mas... y consiguió que una enorme masa de población cambiase la percepción que sobre los animales se tenía hasta entonces.
Un conocido que se casó con una norteamericana, en el último viaje que hizo para disfrutar de su familia política, se llevó una bronca por decirle a los niños que en España se podía comer conejo... los niños estaban aterrados de solo pensarlo.
Y no me malinterpreten, me gustan los animales, no les deseo mal alguno ni quiero que se extingan las ballenas, pero me parece un contrasentido que se anteponga el bienestar de las mascotas al de los hombres.
En cualquier caso, y perdonen la digresión, quiero poner de manifiesto que incluso las cosas buenas, en malas manos, pueden producir efectos nocivos.
La presión de los movimientos LGTB para imponer sus absurdos caprichos ideológicos ha llegado también a la factoría Disney.
Y eso no sería preocupante si no fuera porque el contenido multimedia de esta empresa está especificamente diseñado para consumo de los niños.
De modo que la abyecta ideología de estos talibanes, poco a poco, se va metiendo en nuestros hogares para "visualizar" y "normalizar" en nuestros niños, las estupideces indefendibles de la cosa de género.
La última ha sido que están planeando hacer un desfile del "orgullo" en Disneyland París donde, imagino, presentarán a los entrañables personajes de nuestra infancia como miembros activos del movimiento LGTB.
Es alarmante.
Porque - conscientes de que las mentes infantiles son las mas manipulables - están dispuestos a sembrar las cabecitas de nuestros niños con todas esas anormalidades que defienden a capa y espada para perpetuar la estafa mas grande de este siglo.
Porque si bien no pueden cambiar la realidad, si pueden cambiar la percepción que se tiene de ella... y meterse en nuestra casa, en la educación y los principios que queremos transmitir a nuestros hijos.
Y no tienen derecho - por mas que digan - a hacerlo.
¡Dejad en paz a nuestros hijos!... partida de malnacidos.
El restaurante no estaba mal, era un local limpio, con una decoración un poco minimalista para mi gusto y con el numero adecuado de camareros.
El menú era de degustación.
Admito que llegué al restaurante con cierto resquemor, porque la última vez que me pusieron por delante un menú de degustación fui incapaz de pasar del cuarto plato (y había siete)... pero no se dio ese caso.
En una variedad asombrosa de recipientes de todos los tamaños fueron desfilando ante mis ojos una serie de platos cuyo denominador común era la rídicula cantidad de comida que portaban.
Admito que no estaban malos... unos me gustaron mas que otros (ya saben, para gustos se hicieron los colores), pero tras probar ocho o diez cosas diferentes, regado todo ello por un vino pasable de la comarca en la que se asentaba el local, me levanté con hambre y la sensación de que, habida cuenta el precio de la experiencia, me habían tomado el pelo.
No es lo peor que me ha pasado en restaurantes.
En general, supongo que como usted, estoy dispuesto a pagar un poco mas de lo razonable cuando la comida es buena y abundante, y me molesta en sobremanera pagar (aunque no sea mucho) por ingerir basura aunque me la sirvan a toneladas.
Cuando salimos por la puerta del restaurante uno de mis amigos comentó: "¡Cuanto daño ha hecho Master Chef!"
Y esto me llevó a pensar cuan incautos podemos llegar a ser los mortales y que maleables cuando caemos en las garras de una persona manipuladora.
Recordé haber leido que cuando se proyectó por primera vez en los USA la película "Bamby" creó una enorme conmoción social... de hecho, en uno de los cincuenta y dos estados se prohibió la caza de ciervos. Esta prohibición generó que una decada después hubiese poco menos que exterminarlos, porque los problemas derivados del crecimiento desmesurado de la población de ciervos crearon una situación insostenible.
Supongo que cuando el malagueño Walt Disney empezó a humanizar a los graciosos animalitos que salían en sus películas, no podía prever que transcurridos unos años habría movimientos sociales pidiendo derechos para los animales.
Dotar de características humanas a los animales para contar historias con moraleja ya lo hacía Esopo, pero la factoría Disney dio un paso mas... y consiguió que una enorme masa de población cambiase la percepción que sobre los animales se tenía hasta entonces.
Un conocido que se casó con una norteamericana, en el último viaje que hizo para disfrutar de su familia política, se llevó una bronca por decirle a los niños que en España se podía comer conejo... los niños estaban aterrados de solo pensarlo.
Y no me malinterpreten, me gustan los animales, no les deseo mal alguno ni quiero que se extingan las ballenas, pero me parece un contrasentido que se anteponga el bienestar de las mascotas al de los hombres.
En cualquier caso, y perdonen la digresión, quiero poner de manifiesto que incluso las cosas buenas, en malas manos, pueden producir efectos nocivos.
La presión de los movimientos LGTB para imponer sus absurdos caprichos ideológicos ha llegado también a la factoría Disney.
Y eso no sería preocupante si no fuera porque el contenido multimedia de esta empresa está especificamente diseñado para consumo de los niños.
De modo que la abyecta ideología de estos talibanes, poco a poco, se va metiendo en nuestros hogares para "visualizar" y "normalizar" en nuestros niños, las estupideces indefendibles de la cosa de género.
La última ha sido que están planeando hacer un desfile del "orgullo" en Disneyland París donde, imagino, presentarán a los entrañables personajes de nuestra infancia como miembros activos del movimiento LGTB.
Es alarmante.
Porque - conscientes de que las mentes infantiles son las mas manipulables - están dispuestos a sembrar las cabecitas de nuestros niños con todas esas anormalidades que defienden a capa y espada para perpetuar la estafa mas grande de este siglo.
Porque si bien no pueden cambiar la realidad, si pueden cambiar la percepción que se tiene de ella... y meterse en nuestra casa, en la educación y los principios que queremos transmitir a nuestros hijos.
Y no tienen derecho - por mas que digan - a hacerlo.
¡Dejad en paz a nuestros hijos!... partida de malnacidos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)