Si te levantas a las seis y media de la mañana, te comes cuarenta minutos de transporte público, trabajas un numero adecuado de horas, comes cualquier cosa, echas otras cuantas horas más de actividad laboral y llegas a casa (después de otros cuarenta minutos de transporte público) hecho unos zorros, te queda muy poco tiempo para la política.
Si además tienes que atender a unas mínimas necesidades familiares, arrimar el hombro en las “tareas domésticas”, ayudar a los niños con los deberes o ir a la compra, cuando regresas del “Mercadona” apenas te queda fuelle para apretar el botón del mando a distancia de la tele.
Todo ello sin ánimo, por supuesto, de ser el hombre mas rico del cementerio, porque llegar a fin de mes con sueldos del 2005 y gastos del 2014 – coincidirán conmigo - es bastante complicado… y esa tarea se suele llevar el resto de imaginación que te dejan las tareas anteriormente mencionadas.
De modo que para dedicarse a la política o a la caridad pura y dura, hay que disfrutar de una especial “disposición de tiempo y ánimo”, y tener, al menos, las necesidades mínimas cubiertas.
La casta emergente está compuesta por niñatos que no saben lo que es buscar trabajo y partirse el lomo cuando lo encuentras.
Son hijos de papá que han podido dedicarse a hacer el cimbel – generalmente en la universidad – porque los garbanzos calientes estaban asegurados… nunca han buscado trabajo. Las becas y subvenciones que la endogámica mafia universitaria les ha concedido les ha dado lo que necesitaban para dedicarse a hacer la “revolución”, siempre en teoría, y para irse haciendo un huequito en el “sistema” desde el que poder “administrar” dinero público.
Su contacto con la realidad social es inexistente, y su labor se ha desarrollado siempre entre círculos de holgazanes inempleables y resentidos por que la sociedad no les dá “el sitio que merecen”.
Manejan las redes sociales como auténticos expertos... recogen de ellas los deseos "del pueblo" y les prometen soluciones facilonas. La web 2.0 es su medio de agit-prop y lo explotan con maestría... sin gastar un duro acceden a mas gente que los apesebrados partidos políticos al uso.
Su objetivo es convencer a la juventud porque su estrategia es a medio plazo.
Esa juventud que hace diez años "pasaba de política", por obra y gracia de Zapatero primero y Mariano después, el inutil y el traidor, han pasado a interesarse "en la política", aunque sólo sea para derruir esta basura de cleptocracia en la que nos hemos convertido.
Como se dá el caso que nuestra juventud es con creces la peor formada de los ultimos cien años, el rebaño que forman es altamente manejable... las simplezas que hacían sonreir a nuestra generación, se han convertido en verdades indiscutibles para esta masa indocumentada y edonista que hemos criado.
Preocupante es que frente a "Podemos" no haya nada. Sólo un aburrido y poco fiable grupo de "profesionales de la política", mercenarios de si mismos, centrados en la venta del bíblico plato de lentejas...
Pero lo peor de todo (para echarse a temblar) es que están hablando de reformar la Constitución.
Pero lo peor de todo (para echarse a temblar) es que están hablando de reformar la Constitución.