Por extraño que suene, España tiene también su “Memorial Day”. Es el 2 de Noviembre y se celebra en los acuartelamientos (creo que en ninguna otra parte) como el “Día de los caídos por España”.
Sin embargo, si hiciésemos una encuesta, uno de cada cinco mil españoles conocería este dato (soy un optimista, ¡qué le voy a hacer!).
Comento ésto porque en el momento de escribir estas lineas están poniendo en la televisión el partido de fútbol entre las selecciones de España e Inglaterra.
Sucede que hoy es el “Memorial Day” de los ingleses, y la selección inglesa de futbol y – no se lo pierdan – la española, han salido a jugar con un brazalete negro en el brazo izquierdo. Además se ha guardado un respetuoso minuto de silencio que no ha sido alterado por los mujidos de nadie.
Y que quieren que les diga, este tipo de cosas me tocan el corazón... siento una sana envidia por un pueblo que será tan o mas miserable que el nuestro, pero que respeta a sus muertos.
En España, desde que nos vendieron que la bandera nacional es un símbolo facha, allá por los años setenta, no levantamos cabeza.
También nos vendieron unas cuantas toneladas de basura ideológica caduca que ha terminado desnaturalizándonos como Nación.
Llama la atención que toda la parafernalia que se niega a España como nación (simbología, bandera, actos oficiales...) se reproduce hasta el ridículo en las taifas catalanas, vascas, gallegas... y a todos les parece estupendo.
Nadie en España quiere ser español, porque ser español no “mola”... y en esta crisis económica esto tiene mucho que ver, porque las “autonosuyas” - que no mías – se han dedicado a saquear sin miramientos el erario público para hacer visible el “hecho diferencial”, y ahora que la teta se ha secado, y se pone de manifiesto la irresponsabilidad de sus lamentables neuras, se hacen los suecos y culpan a los idus de marzo.
Todo menos reconocer que su comportamiento es responsable – y mucho – de la decadencia de España. (objetivo que, por otra parte, se habían fijado).
Quiere el hombre, desde que es hombre, alinearse con los fuertes. Ser de los que reciben la paliza no es plato de gusto para el mamífero medio, por eso el español sólo se siente español cuando Nadal le pasa la mano por el morro a Federer o le metemos un gol a Holanda.
Y que quieren que les diga... me da mucha pena.
Porque esta vieja Nación tiene para enorgullecerse tantas o mas cosas que Inglaterra... pero claro, ellos tienen la ventaja de ser ingleses.
