Ayer los mamporreros del PSOE (lease sindicatos) le han montado un número de órdago a la grande al PP en Murcia.
Al final, como siempre que sale la chusma a la calle, han acabado agrediendo físicamente a un senador (del PP), a un cargo autonómico (del PP) y a un fotografo de "La Verdad" (que es un periódico "no afecto" al PSOE)... además de perserguirlos hasta obligarlos a encerrarse en una iglesia donde, gracias a la intervención del párroco y de un policía que andaba por ahí (de "paisano", es decir "fuera de servicio") han conseguido que no profanen el templo para darle una paliza al político.
Entre los manifestantes estaba la aspirante del PSOE a la Comunidad y los gorilas ugeteros a sueldo de siempre.
Ni que decir tiene que la responsbilidad de lo sucedido está bastante distribuida.
Hay una evidente responsabilidad en la gentuza que ha perpetrado la agresión y que - al tiempo - va a salir impune de las consecuencias que en un estado democrático deberían derivarse de estos hechos. Lo cual va a suceder porque los agresores son de izquierdas y los agredidos de derechas.
Hay una resonsabilidad enorme del Delegado del Gobierno por no impedir esta tropelía... en la que ha participado su compañera de secta y el mercenario "brazo armado" sindical del PSOE.
Hay una responsabilidad de la FIscalia por no haber empezado a actuar en el tema... ¿recuerdan la presuntísima agresión a Bono?... ¿Cuanto tardáron en salir esposados de sus casas dos militantes del PP que increpáron al cacique?.
Hay una responsabilidad en términos genéricos de nuestra clase política por haber gobernado España como si fuese suya, cargándose de privilegios y haciendo ostentación de una conducta que - a diario - roza, cuando no cruza, la delgada línea que traza el códido penal.
Y hay una responsabilidad evidentisima en la actitud del PSOE y sus medios afines por haber estado azuzando el enfrentamiento entre españoles desde el mismo día en que el desaparecido de la Moncloa pisó moqueta.
Como la situación económica va a ir a peor, cabe pensar que estos hechos van a repetirse... y - o mucho me equivoco - o se repetirá en los mismos términos: chusmaza de izquierdas agrediendo y gente de derechas soportando la agresión (como si por haber elegido una opción política concreta, mereciese el castigo).
Y - si les soy sincero - espero que el gobierno no tome cartas en el asunto.
Porque si esta piara que nos gobierna toma cartas en el asunto, los españoles decentes vamos a tener que atrancar las puertas de nuestras casas.
Al final, como siempre que sale la chusma a la calle, han acabado agrediendo físicamente a un senador (del PP), a un cargo autonómico (del PP) y a un fotografo de "La Verdad" (que es un periódico "no afecto" al PSOE)... además de perserguirlos hasta obligarlos a encerrarse en una iglesia donde, gracias a la intervención del párroco y de un policía que andaba por ahí (de "paisano", es decir "fuera de servicio") han conseguido que no profanen el templo para darle una paliza al político.
Entre los manifestantes estaba la aspirante del PSOE a la Comunidad y los gorilas ugeteros a sueldo de siempre.
Ni que decir tiene que la responsbilidad de lo sucedido está bastante distribuida.
Hay una evidente responsabilidad en la gentuza que ha perpetrado la agresión y que - al tiempo - va a salir impune de las consecuencias que en un estado democrático deberían derivarse de estos hechos. Lo cual va a suceder porque los agresores son de izquierdas y los agredidos de derechas.
Hay una resonsabilidad enorme del Delegado del Gobierno por no impedir esta tropelía... en la que ha participado su compañera de secta y el mercenario "brazo armado" sindical del PSOE.
Hay una responsabilidad de la FIscalia por no haber empezado a actuar en el tema... ¿recuerdan la presuntísima agresión a Bono?... ¿Cuanto tardáron en salir esposados de sus casas dos militantes del PP que increpáron al cacique?.
Hay una responsabilidad en términos genéricos de nuestra clase política por haber gobernado España como si fuese suya, cargándose de privilegios y haciendo ostentación de una conducta que - a diario - roza, cuando no cruza, la delgada línea que traza el códido penal.
Y hay una responsabilidad evidentisima en la actitud del PSOE y sus medios afines por haber estado azuzando el enfrentamiento entre españoles desde el mismo día en que el desaparecido de la Moncloa pisó moqueta.
Como la situación económica va a ir a peor, cabe pensar que estos hechos van a repetirse... y - o mucho me equivoco - o se repetirá en los mismos términos: chusmaza de izquierdas agrediendo y gente de derechas soportando la agresión (como si por haber elegido una opción política concreta, mereciese el castigo).
Y - si les soy sincero - espero que el gobierno no tome cartas en el asunto.
Porque si esta piara que nos gobierna toma cartas en el asunto, los españoles decentes vamos a tener que atrancar las puertas de nuestras casas.